Mar Gonzalo
Nueva York, 28 abr (EFE).- La noticia de que E.W. Scripps se
desprendió de los derechos de Snoopy, Charlie Brown y todos sus
amigos por 175 millones de dólares fue aplaudida hoy por los
accionistas de la empresa, pese a que dejará de ingresar unos 75
millones anuales sólo en comisiones.
"Es una decisión sopesada que nos permitirá centrarnos en nuestra
actividad principal", explicó hoy a Efe Tim King, vicepresidente de
relaciones con inversores de Scripps, una compañía con 131 años de
historia que controla diez cadenas de televisión y decenas de
periódicos y publicaciones en Estados Unidos, entre otros activos.
En realidad lo vendido por la empresa es su unidad United Media
Licesing, donde se integra la gestión de derechos de personajes de
ficción como el agrio oficinista Dilbert y la heroína Fancy Nancy.
Sin embargo, el grueso de su actividad lo aportan los personajes
del cómic "Peanuts" (también conocido como "Charlie Brown y
Snoopy"), con más de cincuenta años de historia y una de las más
editadas y reconocidas del mundo.
La estadounidense Iconix pagará 140 millones de dólares por el 80
por ciento de los derechos sobre los personajes de esa tira, que
empezó a publicarse el 2 de octubre de 1950.
"Compramos porque nos interesaba. Era el momento adecuado. Vimos
que era una gran oportunidad para Iconix en su estrategia de
diversificar la cartera de productos más allá del mundo de la moda y
quisimos aprovecharla", aseguró hoy a Efe una portavoz de Iconix.
Añadió que la empresa, propietaria de decenas de marcas, entre
ellas las de moda Badgley Mischka y Joe Boxer, prevé mantener toda
la plantilla de United Media y velar para que "el negocio continúe
con la mayor normalidad".
Por su parte, la familia de Charles Schulz (1922-2000), aportará
los otros 35 millones de dólares que completan la compra, que
asciende a 175 millones, con lo que controlarán un 20 por ciento
sobre los derechos.
Las acciones de Iconix, que cotiza en el Nasdaq, bajaban hoy un
1,56 por ciento pese a haber anunciado también sus resultados
trimestrales y la revisión al alza de su previsión de crecimiento
para todo el año, y también a pesar de que esta operación supone su
estreno en el mundo de los personajes de ficción y la adquisición de
más de 1.200 derechos y productos protegidos.
Entre ellos, Iconix se hace con los acuerdos publicitarios que
esos populares personajes mantienen con el gigante asegurador
MetLife, que utiliza a Snoopy para sus anuncios, así como con la
cadena de establecimientos Hallmark.
Los títulos de Iconix, que espera que su nuevo negocio genere al
año 75 millones de dólares sólo en comisiones, se han apreciado un
48 por ciento en lo que va de año, gracias también al acuerdo
sellado en marzo con Madonna para relacionar su nombre a distintos
productos.
Diferente ha sido la respuesta de los accionistas de Scripps, que
tras hacer pública la venta de los derechos de este icono pop del
siglo XX han visto cómo sus acciones se disparaban y hoy se
negociaban en Nueva York un 15 por ciento más caras, lo que
demuestra la buena acogida de la operación entre los inversores.
Su consejero delegado, Rich Boehne, explicó en febrero, cuando se
empezó a buscar comprador, que la decisión respondía al interés de
Scripps por crear mayor valor para los accionistas.
Preguntado por los motivos de la venta, King se remitió a los
argumentos de Boehne y explicó a Efe que aunque "Scripps está
orgulloso de United Media, el interés y la actividad que despiertan
los activos basados en personajes hacían de éste el momento
apropiado".
"Había que decidir si continuar operando este negocio crearía más
valor a largo plazo que encontrar alguna alternativa", explicó el
directivo, quien apuntó además que esos derechos pueden ser más
valiosos estando en otras manos.
Lo mismo piensan los herederos de Schulz, según explicó a Efe su
portavoz, Kim Towner, quien detalló que "aunque la familia siempre
ha trabajado muy a gusto con Scripps, ahora saben que comienza una
nueva época en la que tratará de aumentar el valor de los personajes
y elevar su presencia en todo tipo de plataformas".
Cuando Schulz se retiró en 1999, tenía más de 355 millones de
lectores en 21 idiomas en más de 2.600 periódicos y revistas de 76
países de todo el mundo.
Las licencias de Charlie Brown y sus amigos generan al año ventas
por más de 2.000 millones de dólares en todo el mundo, según datos
de Iconix, cuya director ejecutiva, Neil Cole, describió esa cifra
como "el sueño de cualquier comerciante". EFE