Bruselas, 19 feb (EFE).- El ministro español de Industria, Miguel
Sebastián, dijo hoy que aún no ha recibido ninguna solicitud
concreta de ayudas de General Motors (GM) para financiar la
reestructuración de su filial europea, que prevé recortar 900
empleos en la planta de Figueruelas (Zaragoza, noreste de España).
"No hemos recibido por parte de General Motors ninguna petición
concreta", aseguró el responsable de la industria automovilística
española, que viajó a Bruselas para participar en una reunión con
sus homólogos y el comisario del ramo, Antonio Tajani, para discutir
el futuro del sector en Europa.
El plan de saneamiento anunciado por General Motors contempla la
reducción de la capacidad de producción europea en un 20 por ciento
y el recorte de 8.370 empleos de los 50.000 actuales, además de la
obtención de 2.700 millones de euros en ayudas estatales.
El diario económico "Financial Times" publicaba ayer que la
cúpula directiva de la multinacional ha pedido al Gobierno alemán
ayudas por valor de 1.500 millones de euros, así como 400 y 500
millones al Reino Unido y España, respectivamente, en forma de
préstamos o garantías.
Sebastián negó hoy esta información y aseguró que su equipo está
"pendiente de la evaluación que haga la plantilla del plan
industrial de GM", antes de comenzar a negociar sobre cifras
concretas.
"Una vez que tengamos esa aceptación de los trabajadores, será
cuando nos sentemos con GM y hablemos de apoyo financiero", precisó
Sebastián.
El comisario de Industria, Antonio Tajani, también se refirió al
plan de reestructuración de GM para las plantas de Opel, que prevé
el cierre de la fábrica de Amberes (Bélgica), donde trabajan 2.377
personas, para trasladar a Bochum (Alemania) la producción belga del
Astra de tres puertas.
Tajani anunció que se reunirá la próxima semana con las
autoridades belgas para discutir a "nivel técnico y político" la
reestructuración planteada por el gigante de la automoción
estadounidense.
Tajani respondía así a las quejas planteadas esta mañana por el
representante flamenco, que consideró que la concesión de préstamos
millonarios a la compañía por parte de Alemania para evitar un
cierre en su territorio, mientras se desmonta Amberes, podría
suponer un "problema a nivel europeo".
El presidente de la región belga de Flandes, Kris Peeters, pidió
también que los gobiernos no concedan ninguna ayuda a la empresa
hasta que la Comisión publique su prometida evaluación global del
plan de reestructuración, con objeto de evitar una competición de
subvenciones entre los estados, deseosos de mantener el empleo.
A este respecto, Tajani aclaró que sus servicios no publicarán
este análisis hasta reunirse con las autoridades belgas la próxima
semana.
Sebastián aseguró que el Gobierno de España evaluará la concesión
de las ayudas "respetando las reglas comunitarias y bajo la
supervisión de la CE", de la que aseguró que "está haciendo un buen
trabajo en este asunto". EFE