Buenos Aires, 5 sep (EFE).- Ecologistas de la ciudad argentina de
Gualeguaychú volvieron a marchar hoy en protesta hacia el paso con
la vecina uruguaya de Fray Bentos, donde se levanta una papelera de
capital finlandés a la que rechazan por considerarla contaminante.
En medio de la vigilancia de la Gendarmería (policía fronteriza),
que sobrevoló la zona con un helicóptero, la protesta entorpeció por
unas horas el tránsito hacia el puente que conduce a Fray Bentos,
sobre el río Uruguay, situado unos kilómetros después del paraje
Arroyo Verde, donde se reunieron los manifestantes.
La marcha fue convocada por la Asamblea Ambiental de
Gualeguaychú, que ratificó que a pesar del reciente acuerdo entre
los Gobiernos "sigue vigente" el conflicto que estalló en 2004 por
la instalación de una papelera de la finlandesa UPM en Fray Bentos.
Los ecologistas, que ocuparon con unos 300 automóviles los
costados de la ruta a los largo de más de un kilómetro y de momento
descartan reanudar el bloqueo del paso fronterizo que mantuvieron
entre fines de 2006 y junio pasado, insistieron en desmantelar la
planta de UPM, cosa que Uruguay rechaza y las autoridades argentinas
no apoyan.
También afirman que el pacto alcanzado por Buenos Aires y
Montevideo incumple con el fallo dictado por la Corte Internacional
de Justicia de La Haya, a la que recurrió Argentina en una demanda
contra Uruguay en el peor conflicto bilateral en décadas.
Además, ponen en duda la autonomía de los expertos que han
designado los Gobiernos para hacer controles ambientales en la zona
y dentro de la planta de UPM, capaz de producir más de un millón de
toneladas anuales de pasta de celulosa.
"No se cumplieron ninguno de los puntos que pedimos y no nos van
a intimidar", declaró a radios locales la asambleísta Paola Robles
al recordar que sigue adelante una demanda penal del Gobierno con
severos cargos a un grupo de ecologistas de Gualeguaychú por haber
cortado el paso a Fray Bentos durante más de tres años.
El tribunal de La Haya dictaminó en abril pasado que no está
demostrado que la planta de UPM contamine el ambiente, como aducía
Argentina, y dispuso que ambos países se pongan de acuerdo para
preservar el ambiente en el río Uruguay.
Según los ecologistas, "no hay garantías" de la independencia de
la comisión de expertos puesta en funciones el lunes pasado por los
Gobiernos, dijo Robles.
Los ecologistas leyeron una proclama que recoge los motivos de la
protesta, que también se funda en acusar al Gobierno uruguayo de
frenar la llegada de exhortos de jueces argentinos para que
directivos de "la ilegal" UPM declaren en causas abiertas en
Argentina por presunta contaminación del ambiente.
La proclama exige que se reanude el "control y vigilancia" del
ambiente sobre el río Uruguay que llevaban a cabo expertos de
universidades argentinas, mecanismo que quedó anulado por el acuerdo
entre los Gobiernos.
Las autoridades uruguayas son además acusadas de impedir que
pobladores de Gualeguaychú se reúnan con los de Fray Bentos en esa
ciudad vecina y de aplicar una "zona de exclusión" a la navegación
sobre el río Uruguay en la que se levanta la papelera finlandesa.
Aunque Buenos Aires y Montevideo declararon superado el conflicto
una vez conocido el fallo de La Haya y puesto en marcha un acuerdo
bilateral, algunos ecologistas exigen que Argentina haga un nuevo
planteamiento ante tribunales de la Unión Europea.
El 19 de junio pasado, los ecologistas de Gualeguaychú levantaron
el corte del tránsito a Fray Bentos en una "tregua" de dos meses
para facilitar un acuerdo gubernamental, pero vencido ese plazo
resolvieron llevar a cabo "un plan de lucha" que prevé marchas hacia
el paso fronterizo en forma sorpresiva durante todos los domingos de
septiembre. EFE