Lisboa, 26 sep (EFE).- El Tribunal Constitucional portugués consideró ilegales varias disposiciones recogidas en la reforma laboral, aprobada por el Gobierno conservador luso en el verano de 2012, dirigidas a facilitar el despido.
En una sentencia publicada hoy por el máximo órgano judicial del país, se advierte de que algunas de estas normas son demasiado "vagas e indeterminadas", lo que deja en manos de las empresas la elección de los criterios para prescindir de un trabajador.
El Constitucional había anulado ya otras medidas de austeridad, aprobadas por el Ejecutivo, para cumplir con el programa de ajustes y reformas acordado con la troika como contrapartida por su rescate financiero.
La solicitud de fiscalización de la última reforma laboral fue enviada al Tribunal en julio de 2012 por el Partido Comunista de Portugal (PCP), el marxista Bloque de Izquierda (BI) y el grupo Los Verdes, aunque no ha sido hasta catorce meses después -no existía un plazo límite- que los jueces han dado una respuesta.
De acuerdo con la sentencia -que no fue aprobada por unanimidad-, la nueva normativa laboral viola algunos principios constitucionales relacionados con el derecho a la negociación colectiva y el despido por causa justa.
Este tipo de despido sólo se refiere a los casos en que la salida del empleado "no derive de la culpa ni de la empresa ni del trabajador" y vuelven "prácticamente imposible la subsistencia del vínculo laboral".
Sin embargo, en opinión de los jueces, con esta reforma legislativa "se deroga la obligación de que la compañía integre al empleado en un puesto de trabajo alternativo cuando éste exista".
"La ley no aporta las necesarias indicaciones normativas sobre los criterios que deben presidir la decisión de la compañía a la hora de seleccionar el puesto de trabajo a extinguir", reza el fallo.
"La norma cuestionada abre la puerta a despidos arbitrarios o judicialmente incontrolables", alerta el Constitucional. EFE