Buenos Aires, 5 jun (.).- El Banco Central de Argentina perdió casi 1.000 millones de dólares de reservas monetarias en mayo pasado, pero en los últimos días logró frenar la sangría e, incluso, recuperar algo de los dólares perdidos tras imponer mayores restricciones en el mercado cambiario.
De acuerdo a los propios datos del Banco Central, en los primeros cinco meses del año Argentina perdió 2.192 millones de dólares de reservas, pero la sangría se disparó en mayo, cuando se perdieron 979 millones de dólares.
Los picos de demanda de dólares no son nuevos en el país, donde la divisa estadounidense es la inversión de refugio favorita para todo tipo de inversores ante los recurrentes períodos de crisis y en el momento actual, con dos años de recesión a cuestas, el derrumbe económico en medio de la pandemia de COVID-19 y la incertidumbre por la renegociación de la deuda, es uno de ellos.
Tampoco son novedad las restricciones cambiarias: regresaron con fuerza el año pasado y han dado lugar a una brecha considerable entre el tipo de cambio oficial (unos 70 pesos por unidad), al que cada vez pueden acceder menos personas, y las cotizaciones alternativas, sea a través de los canales financieros, como la bolsa (114 pesos por dólar), o el mercado informal (123 pesos).
Estas diferencias revelan por un lado cuánto está dispuesto a pagar un argentino por un dólar si no puede comprarlo en la plaza oficial y, además, acrecientan el apetito por lo poco que se pueda adquirir al conveniente precio oficial, alentando la demanda y obligando al Banco Central a vender divisas para sostener la cotización.
Ante este escenario, las autoridades argentinas han adoptado medidas para limitar las operaciones tanto en el mercado único libre de cambios (MULC, la plaza mayorista oficial y a la que acuden, entre otros, los importadores para saldar sus operaciones), como en los canales financieros alternativos.
La más fuerte se adoptó hace una semana, cuando se dispuso que si una empresa tiene que pagar una importación o saldar una deuda en el exterior, primero lo haga con las divisas líquidas que ya posea y, si necesita acceder al MULC, necesita la autorización del Banco Central y no podrá hacerlo si en los últimos 90 días compró dólares a través de los canales financieros.
Desde la imposición de esta medida, el Banco Central ha logrado volver a tener una posición compradora en el mercado y en las últimas cinco jornadas logró recomponer reservas por 301 millones de dólares, hasta cerrar este jueves en 42.749 millones.