Seúl, 1 nov (EFE).- La Policía de Seúl elevó hoy su nivel de alerta al segundo más alto como parte de las medidas para reforzar la seguridad en la capital surcoreana ante la cumbre del G20, que se celebrará los días 11 y 12 de noviembre.
"A diez días de la cumbre del G20 hemos puesto a la Policía de Seúl en un nivel de alerta más alto", indicó hoy el comisario de la Policía Metropolitana de Seúl, Lee Sung-gyu, citado por la agencia local Yonhap.
Con esta medida se movilizarán 1.800 agentes de tráfico y 388 vehículos para proteger y asegurar las vías de paso para los líderes del G20, formado por los países industrializados y emergentes, y sus delegaciones.
El comisario pidió la comprensión de los habitantes de Seúl que podrán verse sometidos a controles y a limitaciones en el tráfico rodado, especialmente en los alrededores del complejo de COEX donde tendrán lugar las reuniones, en la zona sur de Seúl.
Asimismo, 6.600 agentes de seguridad y 200 unidades más se desplegarán en 850 puntos de la ciudad, incluidas estaciones de metro, para bloquear posibles protestas de grupos locales o antiglobalización.
En total, el despliegue policial con motivo de la Cumbre rondará los 50.000 efectivos, entre ellos 20.000 policías antidisturbios y miembros de cuerpos especiales, que ya se encuentran en alerta.
Por su parte, el Ejército surcoreano, ayudado por Estados Unidos, que mantiene unos 28.000 efectivos en el país asiático, está en su máximo nivel de alerta para vigilar los movimientos de la Fuerzas Armadas del régimen comunista de Corea del Norte.
Este despliegue está considerado el mayor jamás realizado en Corea del Sur para la celebración de un evento.
Además, fuentes del Ministerio de Transporte indicaron que el nivel de alerta en los 15 aeropuertos del país se elevará el jueves, 4 de noviembre, a "naranja" para evitar la llegada de miembros de grupos terroristas o manifestantes con antecedentes violentos.
A partir del día 8 la alerta se elevará "rojo", el máximo, en los principales aeropuertos internacionales del país entre ellos, Incheon y Gimpo, los más próximos a Seúl.
Hasta el momento, Corea del Sur ha negado la entrada a unos 200 extranjeros al país ante el temor de que participen en altercados durante la cumbre, la mayoría de ellos tenían antecedentes por participar en manifestaciones violentas. EFE