Fráncfort (Alemania), 26 sep (.) .- La agencia de medición de riesgos Standard & Poors (S&P) advierte de que casi 3.800 millones de euros en deuda corporativa europea calificada vencerán en 2024.
La deuda corporativa europea con vencimiento hasta 2024 aumentó un 7 % a 3.800 millones de euros el año pasado, añade S&P Global Ratings en su último informe sobre el vencimiento de la deuda corporativa europea.
"Es probable que los vencimientos sean manejables, ya que el 85 % de la deuda con vencimiento califica como grado de inversión y la mayoría de la deuda de alto costo y grado especulativo no vence hasta 2022 y después", considera S&P.
"Aunque la relajación monetaria contribuye a reducir los costes de financiación, las empresas podrían enfrentar condiciones financieras más desafiantes a medida que el crecimiento económico se desacelera y la incertidumbre del Brexit continúa", advierte.
El BCE ha bajado el tipo de los depósitos bancarios 10 puntos básicos, hasta el -0,50 %, y ha anunciado un nuevo programa de compra de deuda pública y privada.
El tipo de interés de la facilidad de depósito es el ancla de los tipos de interés a corto plazo.
La reanudación de las compras netas de activos mantendrá controlados los tipos de interés a largo plazo mediante la compresión de las primas de riesgo, según el BCE.
Estas medidas deberían ayudar a reducir los costes de financiación de las empresas.
La emisión de deuda corporativa europea calificada aumentó un 6 % interanual, hasta 452.000 millones de euros, en el primer semestre de 2019, según cifras de S&P.
La emisión de las empresas no financieras aumentó especialmente, un 9 %, pero las que ofrecen servicios financieros también emitieron más deuda.
"Esta nueva emisión impulsa que las empresas refinancien su deuda y retrasa los vencimientos a años posteriores", dijo el director de S&P Global Ratings Research, Evan Gunter.
El sector de los servicios financieros contabiliza la mayor parte de la deuda que vence, un 51 % de la deuda vence hasta 2024.
La deuda con grado de inversión representa el 85 % del total, unos 3,2 billones de euros, según cifras de S&P.
El BCE ha ampliado también la posibilidad de adquirir deuda privada con rendimientos inferiores al tipo de interés de la facilidad de depósito, que está en el -0,50 %.
El BCE compra bonos garantizados, bonos de titulización de activos y bonos corporativos.