Por Alan Baldwin
AUSTIN, EEUU (Reuters) - Lewis Hamilton tendrá que esperar otra semana más para poder conquistar su quinto título mundial de Fórmula Uno después de que el piloto de Mercedes terminara tercero el domingo en el Gran Premio de Estados Unidos, el cual ganó el veterano de Ferrari (NYSE:RACE) Kimi Raikkonen.
La merecida victoria fue la primera del finlandés de 39 años desde el Gran Premio de Australia de marzo del 2013, una brecha de 113 carreras que se remonta a cuando competía por Lotus y la vigésimo primera de su carrera.
El conductor holandés de Red Bull Max Verstappen terminó en un inesperado segundo lugar tras partir del puesto octavo, en un emocionante final donde los tres primeros autos iban casi pegados y se separaron en última instancia por tan sólo 2,1 segundos en la línea de meta.
Sebastian Vettel de Ferrari, el único rival de Hamilton por el título, quedó en décimo quinta posición en la primera vuelta, pero se recuperó para terminar en cuarto lugar, un resultado que significa que el campeonato sigue en disputa antes del Gran Premio de México el próximo fin de semana.
Hamilton, con 346 puntos, ahora tiene una ventaja de 70 sobre Vettel, quien ha sido cuatro veces campeón, con un total de 75 unidades en juego en las últimas tres carreras.
Eso significa que incluso si Vettel gana en México, el británico sólo debe terminar séptimo para asegurarse el título, pero el domingo fue una oportunidad perdida para Mercedes, que podría haber ganado con una mejor estrategia.
"En realidad pensé que podríamos haberlo hecho mejor, pero esto es lo mejor que pudimos hacer al final", dijo Hamilton. "Sólo tenemos que seguir trabajando y seguir presionando en la próxima carrera", agregó.
(Información de Alan Baldwin. Traducido por Carlos Aliaga)