Las nuevas carteras están dirigidas a clientes asesorados de banca privada y premier que buscan tener “exposición a mercados atenuando el efecto de los extremos de los ciclos de valoración en renta variable” y se pueden contratar con una inversión inicial de 6.000 euros. Al igual que el resto de las soluciones de gestión discrecional del grupo, pueden ser contratadas a distancia a través de la operativa ‘Ready to buy’ sin que el cliente tenga que desplazarse a la oficina.
El modelo matemático de las Smart Allocation utiliza variables que analizan el ciclo económico, el valor relativo entre los activos y las tendencias a corto plazo en los precios. Teniendo en cuenta estas tres variables, el modelo identifica distintos escenarios de mercado que generan ajustes en la cartera.