MADRID (Reuters) - El gestor del sistema gasista Enagás (MC:ENAG) anunció el martes un crecimiento del 3,5 por ciento en su resultado bruto de explotación a marzo en unos resultados que según su presidente, Antonio Llardén, sientan las bases para alcanzar los objetivos del grupo.
Los resultados del grupo se vieron afectados negativamente por provisiones en algunos activos y la ausencia de extraordinarios respecto al primer trimestre del año pasado, que hizo más desfavorable la comparativa.
Enagás sigue rastreando el mercado para comprar activos que permitan incrementar la internacionalización de la sociedad y ha identificado una capacidad inversora de 400 millones de euros hasta 2020 para realizar operaciones.
Incluso no descarta entrar en el sector de las renovables, principalmente en proyectos de biogás, pero hasta dentro de dos años no prevé inversiones a gran escala.
"Este tipo de inversiones a corto plazo o no se van a producir o serán a escala de laboratorio", explicó Llardén en una conferencia con analistas para presentar sus resultados del primer trimestre.
El grupo anunció una reducción del 33 por ciento en su beneficio neto durante el primer trimestre hasta los 104 millones de euros por la peor comparativa respecto al año pasado, en el que se vio impulsado por los extraordinarios de la consolidación global de GNL Quintero en Chile.
Sin tener en cuenta este efecto, Enagás indicó que su beneficio habría subido un uno por ciento.
Los ingresos permanecieron planos en 342,2 millones de euros, con una deuda ligeramente a la baja, hasta 4.791 millones de euros frente a los 5.008 millones de 2017.
El grupo reiteró sus objetivos de alcanzar un Ebitda de 1.073 millones de euros y un beneficio neto de 443 millones al cierre de 2018.
Los títulos de Enagás cedían un 0,73 por ciento a las 1231 hora local, con el Ibex-35 cayendo un 0,33 por ciento.