LIMA (Reuters) - El presidente peruano, Pedro Pablo Kuczynski, dijo el viernes que a principios de enero un millonario proyecto de un gasoducto tendría un nuevo inversor, tras los retrasos en la venta de la participación mayoritaria de la brasileña Odebrecht.
La firma Sempra Energy (NYSE:SRE) anunció el miércoles que terminó sin acuerdo las negociaciones con Odebrecht para comprar el control del proyecto del gasoducto de 5.000 millones de dólares, que está bajo la lupa por investigaciones de presunta corrupción en su proceso de concesión en el 2014.
Sempra, en consorcio con Techint buscaba comprar el 55 por ciento que tenía Odebrecht pero para cerrar el acuerdo había pedido al gobierno retirar una cláusula anticorrupción del contrato, que podría cancelar el proyecto si se comprueban presuntas violaciones de la ley.
"La mala noticia es que el consorcio que va tomar el contrato de los brasileños no quiso firmar la cláusula anticorrupción, que está en todas las concesiones de Perú; sino la firman, váyanse", dijo Kuczynski en una presentación en el sur del país.
"Estamos trabajando y espero que para principios de enero tengamos un reemplazante y que sea haga el tubo (de gas) de todas maneras", agregó.
Los otros socios del proyecto -la peruana Graña y Montero, con 20 por ciento, y la española Enagás (MC:ENAG), con 25 por ciento- trabajan con Techint en alternativas que permitan sacar adelante el proyecto en un breve plazo.
El proyecto es considerado clave en Perú porque permitiría la creación de un polo petroquímico en el sur y surtiría de energía a grandes mineras que operan en el país andino.