Valencia, 24 mar (.).- Los accionistas que han intervenido en la junta de Bankia (MC:BKIA) celebrada hoy en Valencia han avanzado que su próxima batalla será la devolución de los gastos financieros de las hipotecas, mientras que los representantes de los trabajadores han pedido no ser los paganos de la posible fusión con BMN.
Únicamente dieciséis accionistas han tomado la palabra en el turno de intervenciones abierto tras el discurso del presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, un número pequeño en comparación con el de juntas anteriores.
Uno de ellos, Lorena García, de Adicae ha reconocido el esfuerzo realizado por la entidad para dar una solución a los afectados por la salida a bolsa y las cláusulas suelo, aunque ha expuesto su malestar por las "mínimas cuantías" que se han devuelto "a cuenta del rescate", de "solo" 1.836 millones de euros de un total de 23.300 millones de aportaciones públicas.
Goirigolzarri, en una respuesta posterior, ha afirmado que los 4.400 millones correspondientes a la devolución por la salida a bolsa y los híbridos, de no haberse producido, habrían ido a la compensación de las ayudas.
Además ha insistido en que, excepto en la primera junta de Bankia, en todas ellas se ha tratado de dar solución a temas complejos como los híbridos, las cláusulas suelo y la salida a bolsa, actuando con "la máxima transparencia" y ofreciendo "sencillez" para la recuperación del dinero.
Como ejemplo de ello, ha citado que 137.000 personas tienen el dinero abonado de sus participaciones preferentes gracias al arbitraje, frente a la demanda colectiva de 3.695 afectados que acudieron a la vía judicial y que ahora el Tribunal Superior de Justicia de Madrid ha desestimado.
UGT ha pedido aprovechar la fusión con BMN para eliminar las diferencias salariales y exigir que no produzca pérdida de empleo, y CCOO ha instado a hacer una integración "ordenada y sin medidas traumáticas".
Goirigolzarri anuncia que se reunirán con los sindicatos "como siempre" y defenderán los intereses de los accionistas minoritarios en el proceso de fusión.
Representantes sindicales se han quejado además de la imposibilidad de devolución de las cuantías por las cláusulas suelo a los empleados, y han reivindicado que el banco compense el esfuerzo que les supone el plan de formación puesto en marcha para 5.300 empleados.
Sobre la política retributiva de los consejeros cuestionada por algunos accionistas, ha recordado que los consejeros ejecutivos renunciaron a la retribución variable anual en 2014 y 2015, y el ejercicio de 2016 será el primero que cobren por este concepto, aunque ha dicho que las retribuciones del consejo de Bankia están "muy alejadas" de las de otros competidores.
Una portavoz de la Plataforma por una banca pública ha pedido un banco público que garantice los ahorros de la ciudadanía, pero Goirigolzarri ha calificado de "error" utilizar un banco comercial como Bankia como instrumento de política económica.
Un accionista ha expresado su deseo de que en la fusión con BMN "no quede resto de la delincuencia de los consejos de administración de las cajas de ahorro anteriores" y que, una vez concluya el proceso, "los sapos y las ranas se conviertan en príncipes y princesas".
En varias intervenciones se ha felicitado a los gestores de Bankia por los resultados obtenidos y la gestión realizada, e incluso la campaña Banca Armada ha tenido su espacio de protagonismo para exigir responsabilidades en la implicación del banco en empresas que producen o venden armas.
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