La Paz, 10 jun (EFE).- Más de 15.000 vehículos que ingresaron a Bolivia de contrabando se registraron en la Aduana en dos días de vigencia de una ley de amnistía a esos automóviles que fue aprobada por el presidente Evo Morales, informó hoy esa institución.
La Aduana indicó que el mayor número de esos autos, llamados "chutos" en Bolivia, fue registrado en el departamento de Santa Cruz (oriente), seguido de Cochabamba (centro) y La Paz (occidente).
La cifra alcanzada entre ayer y el mediodía de hoy rebasó las expectativas del ministerio de Economía y Finanzas, del que depende la Aduana, que esperaba 10.000 registros en 15 días, que es el periodo establecido en la ley para la inscripción.
Otras autoridades calcularon que podían llegar hasta un máximo de 20.000, aunque los sindicatos de chóferes advirtieron que la cifra podía dispararse a 100.000 durante ese lapso de tiempo.
Esa institución también ha recibido información de las aduanas de Argentina, Brasil, Chile, Paraguay y Perú sobre autos robados para evitar que sean legalizados gracias a la amnistía en Bolivia.
La prensa ha denunciado estos días casos de vehículos robados, con matrículas clonadas o de países vecinos que ya están en el país o ingresan estos días en caravanas, especialmente desde Chile, para aprovechar la normativa.
La presidenta de la Aduana, Marlene Ardaya, declaró hoy a los medios que la Policía desplazó un importante número de agentes a la frontera para evitar el ingreso de más vehículos, porque la ley solo beneficiaría a los autos que se encontraban en Bolivia antes del miércoles, cuando Morales promulgó la ley.
Las autoridades policiales que combaten el robo de vehículos han admitido también ante los medios que los datos del chasis y el motor son alterados en los automóviles robados en países vecinos, lo que podría permitir que sean legalizados en Bolivia sin problemas.
La Dirección de Prevención del Robo de Vehículos de la Policía de La Paz reconoció también que los automóviles robados en naciones vecinas son cambiados en las fronteras por cocaína boliviana.
El presidente Morales justificó esta semana la legalización de esos autos indocumentados con el argumento de que son comprados por los pobres, aunque hace dos años prohibió su importación porque los consideraba chatarra que aumentaba la contaminación ambiental.
La amnistía es rechazada por los sindicatos de chóferes que amenazan con una huelga el próximo lunes porque creen que los miles de vehículos de contrabando provocarán un colapso en la provisión de combustibles en el país, donde circula 1 millón de autos. EFE