Madrid, 3 may (.).- El Gobierno ha aprobado este martes el real decreto que recoge las nuevas reglas hasta 2030 del mecanismo de compensación de los costes de emisiones de gases de efecto invernadero para la industria de gran consumo energético, y que actualiza los sectores beneficiarios e incluye nuevas obligaciones.
Según ha informado el Ministerio de Industria, el real decreto actualiza las bases de funcionamiento del mecanismo de compensación de los costes de emisiones indirectas de gases de efecto invernadero para la industria con un elevado consumo energético.
España se adapta con esta norma a las nuevas directrices aprobadas por la Comisión Europea para el período 2021-2030.
El real decreto aprobado este martes recoge las nuevas reglas que se aplicarán hasta 2030, actualiza los sectores beneficiarios e incluye nuevas obligaciones.
La compensación se concederá a las empresas mediante el reembolso parcial de los costes de las emisiones indirectas asumidos el año anterior.
El importe máximo de ayuda será, por lo general, igual al 75 % de los costes de las emisiones indirectas en que se haya incurrido.
Las empresas beneficiarias por las ayudas deberán realizar esfuerzos de descarbonización, mejorar su eficiencia energética, reducir la huella de carbono de su consumo eléctrico e invertir al menos el 50 % de la ayuda en proyectos de reducción sustancial de las emisiones de gases de efecto invernadero en sus instalaciones.
Para 2022 se van a movilizar en España 244 millones de euros en ayudas de compensación por costes de CO2, después de que en el Plan de respuesta a las consecuencias de la guerra de Ucrania se incluyera una aportación extraordinaria de 65 millones de euros.
En marzo, la Comisión Europea (CE) dio luz verde al plan de 2.900 millones de euros del Gobierno español para compensar parcialmente los costes de emisiones indirectas de gases de efecto invernadero para el periodo 2021-2030.
Según ha indicado el Ministerio de Industria, la CE concluyó que el plan español era adecuado para ayudar a las empresas con un elevado consumo energético a cubrir parte del aumento de los precios de la electricidad derivado del impacto de los precios del carbono en los costes de generación de electricidad asumidos entre 2021 y 2030.
Las ayudas de compensación de los costes de emisiones de CO2 tienen el objetivo de reducir el riesgo de "fuga de carbono", es decir el traslado por parte de las empresas de su producción a países de fuera de la UE cuyas políticas climáticas son menos estrictas, lo que reduce la actividad en la UE sin que se aminoren las emisiones de gases de efecto invernadero en el mundo.