Londres, 28 jul (EFE).- El Gobierno británico anunció hoy la apertura de la licitación para la extracción de gas de esquisto en numerosas áreas del Reino Unido a través del controvertido sistema de fracturación hidráulica, más conocido como "fracking".
Las compañías que reciban las licencias para la exploración y extracción del gas necesitarán también los permisos medioambientales y de planificación correspondientes, según el Gobierno.
Las autoridades consideran que este gas -conocido en inglés como "shale"- puede ser una importante fuente de energía a largo plazo para el Reino Unido.
El secretario de Estado de Empresa y Energía, Matthew Hancock, dijo que este gas tiene la posibilidad de darle al Reino Unido "una mayor seguridad energética, empleos y crecimiento" económico, pero admitió que hay que "actuar con cuidado y minimizar los riesgos".
El sistema "fracking" consiste en fracturar la roca para sacar los hidrocarburos contenidos en ella mediante la inyección de grandes cantidades de agua y químicos.
Esta forma de extracción no es bien vista por los grupos ecologistas, que advierten de que podría causar temblores de tierra y contaminar los suministros de agua.
Los medios británicos destacan hoy que el proceso de licitación puede resultar controvertido pues hay en general una oposición de la población al "fracking", como ocurrió el año pasado en una zona que se estaba explorando en West Sussex (sur de Inglaterra).
Un informe de la British Geological Survey calcula que en las rocas de Lancashire y Yorkshire, norte de Inglaterra, hay suficiente gas para abastecer las necesidades del país, aunque aún es difícil calcular la cantidad que puede ser extraída.
Según los medios británicos, la presencia de este gas en el norte de Inglaterra supondrá una buena fuente de ingresos fiscales.