Madrid, 17 may (.).- La firma de gestión de activos de la aseguradora Allianz (ETR:ALVG), Allianz Global Investors (Alianz GI), considera que China presenta oportunidades de mercado tras la retirada de restricciones sanitarias por coronavirus y la reapertura económica, y pese a los grandes retos geopolíticos que la rodean.
En una conferencia presencial sobre las oportunidades y perspectivas de Asia y China, la especialista de producto de la oficina de Allianz GI en Singapur, Sarah Lien, ha destacado el entorno favorable del país asiático por su baja inflación y tipos de interés, además del apoyo del gobierno a la economía local.
En ese sentido, que contrasta con las economías occidentales con altas tasas de inflación y tipos de interés, Lien ha destacado que China busca acelerar su autosuficiencia en sectores clave como la tecnología (semiconductores, software, etc.), biotecnología y las fuentes de energías verdes y renovables.
Para Lien, la tecnología se ha convertido en "un asunto de seguridad nacional" para China.
Todo ello se enmarca en un contexto de creciente enfrentamiento económico con Estados Unidos, que prohibió la venta de materiales tecnológicos, como los semiconductores, al país asiático para ralentizar el desarrollo de su tecnología.
Ese desencuentro alcanza cotas más altas con la entrada en la ecuación de Taiwán, país aliado de Estados Unidos cuya soberanía reclama China.
De hecho, un alto cargo de las fuerzas armadas estadounidenses señaló 2024, año en el que se celebran elecciones presidenciales en Taiwán y en EE.UU., como posible fecha para que China invadiese el estado isleño, si bien la opinión no es compartida de manera oficial por la Administración Biden.
La influencia de China en la región Asia-Pacífico tras haber desarrollado importantes lazos económicos en los últimos 30 años es fuerte, apunta Lien, además de ser el mercado más grande del mundo y que concentra a escala global, por ejemplo, la producción e implantación de paneles solares y la red de 5G más grande.
Tras el paso del coronavirus y el poso que dejó- y que ahora está propiciando una importante demanda de consumo y servicios por parte de la población china- Lien destaca la sanidad como una de las áreas estructurales con mayor posibilidad de crecimiento; además, señala que el desarrollo de su industria farmaceútica favorecería al mundo.
No obstante, la experta también remarca como un posible riesgo la normativa regulatoria del gobierno chino, que es profunda en cuanto a las empresas que dan servicios públicos y que puede establecer una regulación de los precios.
En cuanto al sector energético, Lien destaca que el desarrollo de fuentes de energía verde y renovable es atractivo (China depende de las importaciones de gas y petróleo), aunque matiza que, tras un 2022 en el que fue uno de los sectores con mejor comportamiento, los márgenes y la posibilidad de crecimiento son cada vez menores.
Al mismo tiempo, tras la reapertura económica, desde Allianz destacan el potencial de crecimiento sostenido del sector servicios y manufacturero (si bien las exportaciones de este último dependen de la ralentización económica en el resto del mundo), así como de los mercados financieros.
El gigante asiático superó las expectativas en el primer trimestre del año y registró un crecimiento económico del 4,5 %, si bien los últimos datos macroeconómicos de abril revelan un menor ritmo en la recuperación.