Tokio, 26 oct (EFE).- El Banco de Japón (BOJ) se reúne mañana, jueves, para analizar su política monetaria en medio de la persistente subida del yen, que esta semana marcó un récord frente al dólar, y la amenaza de que mine la recuperación económica tras el seísmo de marzo.
En la reunión, de un día, el comité monetario del BOJ podría decidir flexibilizar aún más la política monetaria de la tercera economía mundial, que desde octubre de 2010 mantiene los tipos de interés entre el 0,1 y el 0 por ciento.
Dado que no existe apenas espacio para una nueva rebaja de los tipos, los analistas apuntan a que el emisor podría ampliar su programa de compra de activos, algo que hizo por última vez el pasado 4 de agosto, el mismo día en el que Japón intervino en el mercado de divisas para debilitar el yen.
Ese programa de compra de activos se puso en marcha en octubre de 2010 con la idea de inyectar liquidez al sistema y estimular el crecimiento, y desde entonces se ha ampliado dos veces hasta los 50 billones de yenes (472.477 millones de euros).
Ahora, el BOJ podría hacer una nueva ampliación de este programa por 5 billones de yenes (47.247 millones de euros), según analistas consultados por la agencia local Kyodo.
Los miembros del comité monetario del Banco de Japón, al igual que el Gobierno nipón, se mantienen además atentos a los resultados de la crucial reunión hoy de los líderes europeos para la crisis de deuda soberana, que también ha arrastrado al euro a niveles cercanos al mínimo frente al yen.
El ministro japonés de Finanzas, Jun Azumi, explicó hoy que el BOJ y el Gobierno comparten "una sensación de crisis" y dejó entrever que Japón podría intervenir de nuevo en el mercado de divisas si persiste el encarecimiento del yen, del cual acusó a los "movimientos especulativos".
El yen tocó un nuevo máximo en Nueva York al alcanzar brevemente las 75,73 unidades por dólar, aunque hoy en Tokio se movía en torno a las 76 unidades.
El euro, por su parte, se intercambiaba hoy en torno a los 105,78 yenes en el mercado tokiota. EFE