Madrid, 16 may (EFE).- La prima de riesgo española se ha relajado hoy hasta cerrar en los 482 puntos básicos, después de alcanzar un máximo diario de 507, en medio de rumores acerca de que el Banco Central Europeo (BCE) podría volver a intervenir comprando deuda, algo que lleva nueve semanas sin hacer.
Según los datos del mercado recogidos por Efe, al cierre de la sesión, la rentabilidad del bono español a diez años se reducía hasta el 6,292 % desde el 6,508 % de la apertura, mientras que el de su homólogo alemán se situaba en el 1,47 %.
La prima de riesgo española, que cerró ayer en los 485 puntos básicos, máximo desde la creación del euro, se elevaba esta mañana en 22 puntos básicos, afectada por el fracaso de las negociaciones para constituir un Gobierno de coalición en Grecia y la consiguiente decisión de convocar nuevas elecciones legislativas en junio.
Una situación que podría provocar que el país salga del euro.
Además, según los expertos consultados, el riesgo país se veía influido por las dudas que rodean al sector financiero español y a la situación de las comunidades autónomas.
Todos estos factores influían en la subida de la prima de riesgo española hasta niveles que hacían esperar a los inversores que el BCE reactive la compra de deuda.
El pasado mes de agosto, el BCE comenzó a compra deuda de los países periféricos para ayudar a reducir el elevado rendimiento que tienen que ofrecer los bonos a diez años en comparación con el alemán, al que los inversores acuden cada vez que surgen dudas sobre otros países más débiles.
Una medida que banco dejó de realizar hace nueve semanas y que podría volver a activar, según los analistas, que han indicado que esta posibilidad es la que ha motivado la caída de la prima de riesgo española y la del resto de países periféricos.
Entre estas nuevas tensiones del mercado, el Tesoro público español espera captar mañana entre 1.500 y 2.500 millones de euros en bonos y obligaciones con vencimiento en 2015 y 2016, después de que el martes adjudicase 2.903 millones en letras a doce y dieciocho meses con un interés mayor.
En cuanto a la prima de riesgo del resto de países periféricos, la de Grecia se relajaba ligeramente hasta los 2.745 puntos básicos, desde los 2.789 de la apertura, en tanto que la italiana se reducía hasta los 435.
La prima de riesgo de Portugal se situaba en los 1.030 puntos básicos y la de Irlanda en los 591.
Por su parte, los seguros de impago de deuda (credit default swap o CDS) relativos a los bonos a diez años de España para cubrir la posibilidad de impago de 10 millones de dólares subían y al cierre se cambiaban a 507.000 dólares anuales, los sextos más caros del mundo. EFE