Tokio, 10 jun (EFE).- El Banco de Japón (BOJ) inició hoy la reunión mensual de dos días de su junta de política monetaria con la vista puesta en debatir fórmulas para limitar las subidas de los intereses de los bonos de deuda nipones.
Entre las medidas cuya activación debatirán mañana los nueve miembros de la junta se cuenta la de proveer préstamos a plazos más largos a las entidades financieras.
La entidad debatirá ampliar el vencimiento de sus operaciones para suministrar fondos a tipos de interés bajo con plazos de un año como máximo, hasta los dos años o más.
Esta medida pretende aumentar la liquidez en el sistema para contener una subida no deseada del tipo de referencia a largo plazo que pueda minar la recuperación de la tercera economía del mundo.
Bajo su actual programa para suministrar fondos, el Banco Central nipón extiende préstamos, a un año como máximo, a instituciones financieras con una tasa anual fija del 0,1 por ciento, tomando deuda pública y otros valores como garantía.
En su reunión de mayo, el gobernador del BOJ, Haruhiko Kuroda, dijo que el emisor llevaría a cabo operaciones "flexibles" para la compra de bonos, pese a lo cual el rendimiento del título nipón a 10 años se disparó brevemente hasta el 1 por ciento al día siguiente, su mayor nivel desde abril de 2012.
Mediante su programa de provisión de fondos, sin embargo, el BOJ logró controlar los tipos al ofrecer a partir del pasado 23 de mayo a las entidades préstamos a un año, en lugar de a un mes como es habitual, de manera generalizada.
Un aumento en la tasa de referencia del bono puede conducir a una subida de tipos hipotecarios y de préstamos corporativos a largo plazo que puede dificultar que Japón salga del bache económico.
Se espera también que la junta del BOJ mantenga intacta su política fuertemente expansiva activada en abril, y que tiene como objeto duplicar la base monetaria a un ritmo inédito para acabar con la deflación.
La entidad podría además mejorar su perspectiva de la economía nipona si confirma una recuperación de la producción en el archipiélago.
El propio Gobierno nipón revisó hoy al alza el crecimiento del producto interior bruto (PIB) del país entre enero y marzo hasta el 4,1 por ciento interanual -lo que supone elevarlo seis décimas con respecto al 3,5 por ciento anunciado en mayo- gracias a una mejora de la inversión de capital de las empresas japonesas. EFE
Entre las medidas cuya activación debatirán mañana los nueve miembros de la junta se cuenta la de proveer préstamos a plazos más largos a las entidades financieras.
La entidad debatirá ampliar el vencimiento de sus operaciones para suministrar fondos a tipos de interés bajo con plazos de un año como máximo, hasta los dos años o más.
Esta medida pretende aumentar la liquidez en el sistema para contener una subida no deseada del tipo de referencia a largo plazo que pueda minar la recuperación de la tercera economía del mundo.
Bajo su actual programa para suministrar fondos, el Banco Central nipón extiende préstamos, a un año como máximo, a instituciones financieras con una tasa anual fija del 0,1 por ciento, tomando deuda pública y otros valores como garantía.
En su reunión de mayo, el gobernador del BOJ, Haruhiko Kuroda, dijo que el emisor llevaría a cabo operaciones "flexibles" para la compra de bonos, pese a lo cual el rendimiento del título nipón a 10 años se disparó brevemente hasta el 1 por ciento al día siguiente, su mayor nivel desde abril de 2012.
Mediante su programa de provisión de fondos, sin embargo, el BOJ logró controlar los tipos al ofrecer a partir del pasado 23 de mayo a las entidades préstamos a un año, en lugar de a un mes como es habitual, de manera generalizada.
Un aumento en la tasa de referencia del bono puede conducir a una subida de tipos hipotecarios y de préstamos corporativos a largo plazo que puede dificultar que Japón salga del bache económico.
Se espera también que la junta del BOJ mantenga intacta su política fuertemente expansiva activada en abril, y que tiene como objeto duplicar la base monetaria a un ritmo inédito para acabar con la deflación.
La entidad podría además mejorar su perspectiva de la economía nipona si confirma una recuperación de la producción en el archipiélago.
El propio Gobierno nipón revisó hoy al alza el crecimiento del producto interior bruto (PIB) del país entre enero y marzo hasta el 4,1 por ciento interanual -lo que supone elevarlo seis décimas con respecto al 3,5 por ciento anunciado en mayo- gracias a una mejora de la inversión de capital de las empresas japonesas. EFE