Waldheim García Montoya
Sao Paulo, 3 oct (EFE).- El mercado interpretó la rebaja de la nota de la deuda soberana de Brasil, emitida por la agencia calificadora de riesgo Moody's, como una señal de "cansancio" de la economía brasileña, que a pesar de su fortaleza durante la crisis no ha conseguido "despegar", según opinó hoy una analista.
"El mercado ve esta rebaja y otras que pueden llegar como una señal de cansancio de la economía brasileña, un cansancio después de resistir fuertemente durante la crisis, pero también por un desgaste de no conseguir despegar como se esperaba", señaló a Efe la economista Lucia Andrade.
Moody's rebajó la noche del miércoles de "positiva" a "estable" la calificación crediticia de la deuda, hasta el nivel "Baa2", el penúltimo de grado de inversión.
La analista ratificó la evaluación de Mody's, que consideró que Brasil sufre las consecuencias de tres años sin el crecimiento esperado, una inversión también menor y una creciente deuda.
En 2012, en una decisión inédita, Moody's aplazó la calificación y "eso fue entendido como una duda frente al panorama de la economía brasileña", subrayó Andrade.
Moody's ratificó la calificación crediticia soberana del país en "Baa2", el penúltimo nivel de grado de inversión. La compañía mejoró su panorama a "positivo" en el 2011 y, a fines del año pasado, tomó la inusual medida de postergar en un año más su decisión sobre una posible alza de la nota.
A pesar de las "señales de recuperación", el supervisor de Moody's para Brasil, Mauro Leos, señaló en un comunicado que la agencia considera que "si se materializa el repunte, es poco probable que sea lo suficientemente fuerte como para restaurar la tendencia positiva en las métricas de crédito de Brasil".
Ahora, las principales agencias calificadoras, Standard & Poor's, Fitch y Moody's mantienen a Brasil en el penúltimo peldaño de grado de inversión.
"Con una deuda equivalente al 60 % del PIB (Producto Interior Bruto) y una previsión de crecimiento de 2,5 %, o inferior, es difícil que Moody's mantuviera la calificación positiva", opinó la economista de la Pontificia Universidad Católica (PUC) de Sao Paulo y analista independiente de mercados.
El presidente del Banco Central (BC), Alexandre Tombini, evitó en un evento en el que participó hoy en Londres profundizar en sus comentarios sobre la calificación y prefirió destacar el "rating de grado de inversión" que fue mantenido a pesar de la rebaja.
El exministro de Hacienda Delfim Netto consideró por su parte que la rebaja fue motivada por la "inseguridad" de la trayectoria de la deuda bruta a largo plazo y la falta de acciones para detener el déficit de la previsión social, situación que se podría alcanzar con un "equilibrio fiscal".
La perspectiva de retomar la reducción de las tasas de interés aplicadas en el país, que después de un período de caída y estabilidad en los mínimos históricos volvieron a aumentar, hasta el actual 9,0 %, "cada vez son más distantes, pues la prioridad para el Gobierno sigue siendo en control inflacionario", citó Andrade.
Para la experta, la devaluación del real frente al dólar sigue también impactando a la economía "hasta que el cambio consiga cierto grado de equilibrio". EFE