Por Humeyra Pamuk
DOHUK Irak (Reuters) - Combatientes kurdos están avanzando hacia la norteña ciudad de Mosul, controlada por los militantes, con el objetivo de revertir el avance de los insurgentes del Estado Islámico, dijeron el domingo testigos y un comandante kurdo.
Militantes del Estado Islámico han tomado el control de gran parte del norte de Irak en las últimas semanas, apoderándose de varias ciudades, yacimientos petroleros y de la represa de Mosul, la que les permitiría inundar ciudades o cortar los suministros de agua y electricidad.
Los milicianos pidieron a los residentes del área donde se ubica la represa que abandonen la zona, dijo un ingeniero que trabaja en el lugar y que a menudo tiene contacto con insurgentes suníes.
El ingeniero que trabaja en el dique de Mosul, el más grande de Irak, reveló que militantes del Estado Islámico le dijeron que estaban colocando bombas al lado de las rutas de salida y acceso al lugar, posiblemente ante el temor de una ofensiva de combatientes kurdos que han sido fortalecidos por los ataques aéreos de Estados Unidos.
Halgurd Hikmat, portavoz de los combatientes kurdos, dijo que los aviones de Estados Unidos -que están desplegados sobre Irak por primera vez desde el retiro de las tropas de ese país en el 2011 ante el alarmante avance del Estado Islámico- han estado atacando blancos cerca del dique de Mosul en las últimas 24 horas.
"Si Dios quiere recuperaremos el control del dique hoy", dijo.
Testigos dijeron que fuerzas kurdas han recapturado las ciudades de Batmaiya y Telasqaf, de mayoría cristiana, a unos 30 kilómetros de Mosul, lo más cerca que han estado de la ciudad desde que los combatientes del Estado Islámico expulsaron a las fuerzas del gobierno en junio.
Insurgentes suníes han reforzado sus puestos de control de seguridad en Mosul, llevando a cabo nuevas e intensas inspecciones de vehículos y revisando las tarjetas de identificación, dijeron testigos.
Los kurdos, que viven en una región semiautónoma en el norte de Irak, han ansiado por mucho tiempo independizarse del gobierno central de Bagdad, oprimido por décadas bajo la dictadura de Saddam Hussein.
(Reporte adicional de Youssef Boudlai en la base militar de Serimli, Siria, y Oliver Holmes en Beirut, Isabel Coles en Arbil y Michelle Martin en Berlín; Editado por María Cecilia Mora)