Brasilia, 9 nov (EFE).- El Gobierno brasileño incentivará entre los productores del país la siembra de la semilla de soja natural, sin alteraciones genéticas, para atender la demanda que existe en el mercado internacional, informaron hoy fuentes oficiales.
Brasil es el segundo productor de soja del mundo, por detrás de Estados Unidos, pero el 60% de su oferta exportable es transgénica, un factor que puede costar mercados si la demanda del producto no modificado genéticamente se mantiene en aumento, explicó Ivan Paghi, coordinador del Programa Soja Libre, presentado hoy por el Gobierno.
Según Paghi, diversos países o bloques, como la Unión Europea (UE), mantienen limitaciones a sus compras de productos transgénicos que pudieran afectar a los exportadores agrícolas brasileños, cuyas operaciones ya han registrado una fuerte merma como consecuencia de la crisis financiera global.
En el programa "Soja Libre" participarán técnicos de la Empresa Brasileña de Pesquisa Agropecuaria (Embrapa), organismo oficial que invertirá un millón de reales (unos 590.000 dólares) durante el próximo año en investigaciones dirigidas a buscar una mayor productividad en las semillas tradicionales de la soja.
Según datos del Servicio Internacional para la Adquisición de Aplicaciones Agrobiotecnológicas (Isaaa, por sus siglas en inglés), Brasil es el segundo país, también por detrás de Estados Unidos, en el que más se producen alimentos transgénicos.
La siembra de semillas modificadas genéticamente fue autorizada en Brasil en forma gradual desde el 2003 y, pese a las protestas de movimientos sociales opuestos a su uso, se ha expandido con fuerza, sobre todo en las áreas de soja, algodón y maíz. EFE