Miami (EE.UU.), 16 feb (EFE).- El gobernador de Florida, Rick Scott, anunció hoy su rechazó al proyecto de un tren de alta velocidad para enlazar las ciudades de Orlando y Tampa, que contaba con una ayuda federal de 2.400 millones de dólares.
El nuevo gobernador de Florida explicó en un comunicado que no se necesita ser un experto en economía para saber que "cuando uno gasta más dinero del que ingresa, entonces fracasa".
La decisión de Scott supondrá que ese dinero se destine a otros estados que, como California, apuestan por implantar el modelo de trenes de alta velocidad.
Scott ya había advertido que no invertiría dinero en ninguna red de ferrocarril, para lo que se requería destinar unos 280 millones de dólares por parte del estado.
"Recordemos que tanto el Gobierno de EE.UU. como el de Florida no dispone de recursos propios y sólo devuelve lo que le ha quitado a los contribuyentes", por lo que rechazo el "proyecto de la Administración Obama de construir el tren de alta velocidad", puntualizó.
Scott ya ha informado al secretario de Transporte de Estados Unidos, Ray LaHood, de su decisión final de rechazo al "ObamaRail", basada en que "las proyecciones de ingresos son siempre muy optimistas, pero son los contribuyentes los que acaban pagando por los subsidios".
"La verdad es que el proyecto es muy caro para los contribuyentes y pienso que el riesgo es mayor que los beneficios", aseguró.
Agregó que el "proyecto" del presidente de EE.UU., Barack Obama, para una nueva red de ferrocarril con trenes de alta velocidad "no es la respuesta que Florida necesita para revitalizar la economía".
En enero de 2010, Obama anunció que concedía a Florida 1.025 millones de dólares para que comenzara la construcción del tramo Tampa-Orlando, que contaría con cinco estaciones.
La decisión de Scott supone un revés para las empresas españolas que proyectaban presentar sus ofertas tanto para la primera línea Tampa-Orlando como para la segunda entre Orlando y Miami.
En una conferencia celebrada en octubre pasado, 17 empresas españolas, con experiencia en el sector de ferrocarriles de alta velocidad, expusieron las ventajas de este medio de transporte para el estado de Florida.
La decisión de Scott coincide con sus planes de reducir el déficit del estado mediante el recorte en servicios públicos.
El gobernador de Florida propuso la semana pasada un presupuesto de 65.900 millones de dólares para el año fiscal 2012, que comienza el próximo 1 de julio, y que incluye grandes recortes que afectarían al sector educativo y a programas sociales.
Scott ha planteado también la eliminación de 8.700 puestos de trabajo estatales en momentos en que Florida sufre un índice de desempleo del 12 por ciento, por encima del promedio nacional (9 por ciento). EFE