Washington, 3 feb (EFE).- Los republicanos de la Cámara de Representantes de EE.UU. propusieron hoy recortar en 32.000 millones de dólares el presupuesto para el año fiscal 2011, lo que garantiza una batalla con la Casa Blanca sobre prioridades nacionales.
La reducción del déficit fue una promesa de los republicanos en los comicios de noviembre pasado y, en aras de la austeridad, buscan reducir en casi un 20% el presupuesto de varios programas internos para el año fiscal que comenzó en octubre pasado.
El presupuesto estimado en EE.UU. para el año fiscal 2011 es de 3,7 billones de dólares.
La propuesta de los republicanos supone 74.000 millones menos que el presupuesto que presentó el presidente Barack Obama el año pasado para el ejercicio fiscal 2011 y que no fue aprobado en el Congreso.
No obstante, comparado con las partidas que ha ido aprobando el Congreso para financiar el funcionamiento del Gobierno, ante la falta de un presupuesto, la propuesta republicana supone un recorte de unos 32.000 millones.
La propuesta anunciada hoy por el presidente del Comité de Presupuesto de la Cámara Baja, Paul Ryan, incluye, además, un presupuesto de 635.000 millones para programas de seguridad para el ejercicio fiscal 2011.
Esta cifra es inferior en 16.000 millones a lo que pedía Obama, pero excede en 8.000 millones a la ejecución presupuestaria de este año.
La anterior sesión legislativa nunca aprobó el presupuesto que pidió el presidente Barack Obama para el año fiscal 2011, por lo que los recortes propuestos por la oposición que controla la Cámara baja en realidad se harán dentro de las partidas aprobadas para financiar temporalmente el funcionamiento del Gobierno.
Esa medida vencerá el próximo 4 de marzo y, según observadores, existe el riesgo de que el Gobierno se quede sin fondos si el Congreso no extiende esa ley de gastos para el resto del año.
El anuncio de Ryan de inmediato provocó críticas de los demócratas, que se hicieron eco de las recientes advertencias de la Casa Blanca de que los recortes podrían perjudicar la incipiente recuperación económica.
"La economía ha crecido durante seis trimestres consecutivos, gracias en parte a las medidas demócratas en los últimos dos años", dijo en un comunicado el legislador demócrata Chris Van Hollen.
"Cortamos los impuestos para la clase media y creamos más de un millón de empleos en el sector privado (...) Los recortes de gastos de los republicanos revertirían el progreso que comenzamos a ver", se quejó Van Hollen.
Aunque es necesario reducir el déficit, también "es importante tener responsabilidad fiscal, de forma que no nos cuesten empleos (...) Estos recortes son un paso en la dirección equivocada, en el momento equivocado", enfatizó Van Hollen, el demócrata de mayor rango en el Comité de Presupuesto de la Cámara baja.
Según proyecciones de la Oficina de Presupuesto del Congreso, EE.UU. tendrá este año un déficit de 1,5 billones de dólares.
Para reducir el déficit, los republicanos habían prometido durante la campaña electoral de 2010 un recorte de 100.000 millones de dólares, con la idea de mantener el presupuesto a los niveles de 2008.
"La racha de gastos de Washington se acabó (...) Los límites en los gastos restablecerán la salud del proceso presupuestario y regresarán los gastos para las agencias gubernamentales" a los niveles de antes que se aprobara el plan de estímulo económico y el rescate de Wall Street, dijo Ryan.
Sin embargo, ni Ryan ni otros legisladores republicanos precisaron hoy si propondrán más recortes y cuáles programas serían reducidos.
El plan de los republicanos es someter a votación un proyecto de ley de gastos la semana del próximo 14 de febrero. EFE