MADRID (Reuters) - El expresident catalán y candidato independentista a la Generalitat, Carles Puigdemont, insistió el viernes en que la tecnología permite ser investido a distancia y gobernar la región desde Bruselas, alegando que si volviera a España sería encarcelado.
Tras presentar la víspera la solicitud de delegar el voto en la sesión plenaria que se celebrará antes del 31 de enero, Puigdemont dijo que su vuelta a la Generalitat es lo deseable para respetar el resultado de las elecciones autonómicas de diciembre, que fueron convocadas por el Gobierno español y en las que los secesionistas obtuvieron mayoría.
"Soy perfectamente investible presidente, y tengo todo el derecho del mundo porque así lo ha querido la gente", dijo Puigdemont en una entrevista en Catalunya Radio el viernes.
El expresidente catalán, que no había descartado comparecer en el Parlamento si se le dieran garantías de que no sería detenido por presunta sedición y rebelión, dijo que gobernar la región mediterránea desde Bélgica no era la situación ideal, pero que no tenía otra opción.
"Entre ser presidente y ser presidiario, elijo lo primero porque creo que puedo servir mejor. Desde la cárcel no se puede gobernar", añadió el político del PDeCat y cabeza de lista de la plataforma independentista JxC en diciembre.
Su restitución al frente de la Generalitat incluiría también, afirmó, que el exvicepresidente catalán Oriol Junqueras, actualmente en prisión por las mismas acusaciones que pesan sobre él, volviera a ser su vicepresidente.
Para que Puigdemont sea designado de nuevo, la Mesa del Parlament, elegida esta semana con mayoría soberanista, tiene que dar su visto bueno a una investidura telemática, una posibilidad a la que se oponen los letrados de la cámara y que el Gobierno español paralizará con un recurso ante el Tribunal Constitucional.
El viernes el Parlamento regional anunció que su presidente, Roger Torrent, comparecerá el lunes 22 de enero a las 11.30 para anunciar el candidato propuesto para ser investido presidente de la Generalitat, después de las conversaciones con los diferentes grupos parlamentarios.
JxC y ERC han pactado que Puigdemont sea quien asuma el cargo de presidente de la Generalitat tras las elecciones de diciembre pasado, en las que los independentistas revalidaron la mayoría absoluta de la cámara pero en las que la fuerza más votada fue la unionista Ciudadanos.
Pero si Torrent designa candidato a Puigdemont, el Gobierno central previsiblemente presentará un recurso ante los tribunales para bloquear la investidura.
Las fuerzas independentistas estarían esperando esta posible suspensión judicial para presentar a un candidato alternativo, según informaron diversos medios citando a fuentes de ERC y el PDeCat.
UNA SITUACIÓN QUE VA PARA LARGO
El líder independentista negó que estuviera huido de la justicia, que lo acusa de haber promovido un referéndum de secesión contrario a la ley y la posterior declaración unilateral de independencia que llevó a la intervención de las instituciones catalanas.
Respecto al futuro programa de gobierno, Puigdemont dijo que JXC, ERC y los anticapitalistas de la CUP estaban negociando las políticas que llevar a cabo durante legislatura, sin aclarar si perseguirían de nuevo una independencia unilateral.
"La situación es compleja, durará muchos años y hemos de tener flexibilidad. Hemos hecho grandes progresos y hemos de continuar haciéndolos", dijo Puigdemont.
El Gobierno español dijo a Reuters por boca del ministro portavoz del Gobierno español, Íñigo Méndez de Vigo, que Puigdemont no volverá a convertirse en presidente de la región.
"No será presidente", dijo a Reuters en una entrevista.
Además, Méndez de Vigo reiteró que el Gobierno continuaría durante tanto tiempo como fuera necesario con la aplicación del artículo 155 de la Constitución, instrumento de una histórica intervención del Gobierno central en la comunidad autónoma que incluyó el cese del Govern independentista y la cita electoral de diciembre.
Cuando se le preguntó a Méndez de Vigo si Puigdemont llevaría a cabo sus planes de ser elegido presidente catalán a distancia y gobernar desde Bruselas, dijo:
"No pasará. La única legitimidad es la surgida de la aplicación del 155".
Méndez de Vigo dijo que si la situación continuaba estancada como lo está ahora, habría nuevas elecciones en Cataluña.