Por Aislinn Laing
SANTIAGO, 28 jun (Reuters) - El presidente chileno Sebastián Piñera anunció el lunes un alza de 2.000 millones de dólares al presupuesto de salud para combatir la pandemia de coronavirus, que sigue amenazando al país pese a una de las campañas de vacunación más rápidas del mundo.
El mandatario dijo que los fondos se utilizarán para comprar cinco millones más de dosis de vacunas, fortalecer las instalaciones de atención primaria y la capacidad de pruebas, rastreo y secuenciación del virus.
El mayor gasto busca "fortalecer la lucha contra el COVID-19, que no ha terminado, nadie sabe cuándo va a terminar, pero sí tenemos que estar preparados para darla todo el tiempo que sea necesario", dijo Piñera durante un reporte sanitario.
La alarma en el país crece por la contagiosa variante Delta, cuyo primer caso se confirmó la semana pasada y ha causado olas de contagio en otras naciones.
Aunque ha experimentado un descenso en los casos tras una feroz segunda ola, las autoridades han reforzado los controles de salud en las fronteras y han instado a las personas a extremar precauciones.
Chile ha vacunado al 82% de su población objetivo de 15 millones con al menos una dosis y al 70% con dos. Esta semana está inoculando a menores de 18 años y, dijo Piñera, vacunará a niños de entre tres y 11 años tan pronto como se otorgue la aprobación del regulador.
Los estudios sugieren que dos dosis de las vacunas Pfizer/BioNTech o AstraZeneca (LON:AZN) que se usan en Chile son ampliamente eficaces contra Delta, pero se han planteado dudas sobre si CoronaVac de Sinovac, la más aplicada en Chile, puede contrarrestarla.
La semana pasada, un investigador del Centro de Control de Enfermedades de China dijo que los anticuerpos activados por dos vacunas chinas, que no nombró, son menos efectivos contra Delta que otras cepas, aunque aún ofrecen protección.
También en días pasados, el primer ministro italiano, Mario Draghi, dijo que la vacuna anti-COVID de China "ha demostrado ser inadecuada", señalando la experiencia de Chile como prueba.
El ministro chileno de Salud, Enrique Paris, dijo que Draghi debería corregirse, insistiendo en que Sinovac era eficaz. "Me molesta mucho que una autoridad europea diga que aquí la vacuna no ha funcionado sin tener ninguna información científica sin demostrar", dijo Paris.
La subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza, dijo que era "muy probable" que Chile aplicara una tercera dosis a sus ciudadanos, potencialmente de una vacuna diferente a las recibidas anteriormente, y señaló que "puede ser una posibilidad para aumentar la efectividad de vacunas".
(Reporte de Aislinn Laing)