Por Carjuan Cruz
Investing.com - Los mercados intentan mantener la moderada racha positiva de la semana, con el Nasdaq en su cuarta jornada al alza y el S&P 500 en su tercera. Si bien los volúmenes han sido bajos, los inversionistas comienzan a mostrarse un poco más confiados en cuanto a un posible freno de la inflación.
En efecto, los altos precios han impactado en el consumo, desacelerando la economía, y las empresas han tenido que lidiar con una menor demanda, y gastos más altos, que impactaron en la rentabilidad corporativa.
Por lo que, más allá de las restricciones de liquidez aplicadas por la política monetaria de la Fed, la contundencia mostrada en las actas del organismo, para parar con el acelerado ritmo de los precios, parece generar mejores perspectivas al mercado.
Los principales índices bursátiles de Wall Street se mostraban al alza, a una hora de la apertura de los mercados, con el Dow Jones subiendo 245 puntos, o 0.79%, el S&P 500 acumulando ganancias de 1.07% o 41 puntos, y el Nasdaq de 1.62% o 187 puntos.
Los que impulsan
El índice tecnológico, que acumula un alza de 3.4% en la semana, tuvo un gran impulso ayer de Samsung (KS:005930), que adelantó ingresos por encima de lo esperado en el segundo trimestre, impulsado por altas ventas de chips. Otras acciones del sector también se vieron beneficiadas, como Micron (NASDAQ:MU) y Nvidia (NASDAQ:NVDA).
El Split de acciones de GameStop (NYSE:GME) y el repunte de las acciones en casi 8% -incluso llegó a subir 10%- también favorece al mercado. El minorista de videojuegos y representante principal de las acciones ‘memes’ anunció ayer que el directorio aprobó una división de acciones de cuatro por uno en forma de dividendo. La tendencia sigue a grandes empresas como Amazon (NASDAQ:AMZN) o Tesla (NASDAQ:TSLA), incluso Shopify, que también anunciaron este año divisiones de acciones.
Rebote de mercado bajista o avance duradero
La semana, aunque de bajo volumen, ha traído una racha positiva al mercado, que pudiera indicar un rebote del mercado bajista o un avance más duradero. Los cercanos reportes trimestrales reflejarán el impacto de la desaceleración, y los inversionistas evaluarán si las dificultades que golpearon los ingresos esos meses perdurarán en este segundo semestre, o si las condiciones negativas, como la inflación, pudieran comenzar a ceder.
Lo cierto es que el mercado tendrá que seguir lidiando con una liquidez restringida y alta volatilidad en los próximos meses, mientras los debates ante la posible recesión - o el nivel de su profundidad- continúan.
El reporte de empleo de mañana será clave para evaluar el escenario de una posible contracción, que normalmente pasa por un mercado laboral resentido, lo que refuerza el dato como clave para los mercados. Si el enfriamiento es leve, posiblemente se tome como buena señal, pero si se aleja mucho de los estimados, podría ser indicio de que la recesión llegó o está cerca.