Madrid, 16 jun (.).- La Audiencia Nacional juzgará mañana jueves a Glovo y a dos de sus directivos por una demanda presentada por UGT, que acusa a la empresa de vulnerar la libertad sindical en varios encuentros telemáticos con sus repartidores.
La denuncia, que fue admitida a trámite y se presentó a principios de año, se refiere a dos reuniones en noviembre de 2020, cuando según UGT la empresa de reparto animó a sus "riders" a enfrentarse a los sindicatos en medio del diálogo social abierto entonces para negociar la llamada "Ley Rider".
La normativa -consensuada meses después por el Gobierno, patronal y sindicatos y pendiente de tramitación parlamentaria- prohíbe a las plataformas digitales como Glovo, Deliveroo o Ubereats utilizar a trabajadores autónomos como repartidores y los obliga a que cuenten con un contrato como asalariados.
La decisión del Ejecutivo se produjo después de que el Tribunal Supremo confirmara que los "riders" eran "falsos autónomos" -con las condiciones contractuales vigentes en 2017-, en línea con la posición defendida por la Inspección de Trabajo.
UGT acusa en su demanda al cofundador de Glovo, Sacha Michaud, y a su director de Políticas Públicas, Miguel Ferrer, de "injerencias" que en su opinión vulneran el derecho de libertad sindical.
En las dos videollamadas -con cerca de medio millar de asistentes en cada una-, los directivos defienden que la voz de los repartidores no está bien representada en el diálogo social por los sindicatos.
UGT además cita algunas frases de Michaud y Ferrer de las cuáles interpreta que la compañía instó a estos repartidores a organizarse en torno a las asociaciones pro-autónomos surgidas (como Asoriders, APRA o AAR).