París, 25 nov (.).- La Bolsa de París vivió este viernes una jornada de muy poca actividad en la que su índice general acabó subiendo un casi inapreciable 0,08 % a imagen de una semana en la que ha continuado la tendencia ascendente que se viene constatando desde septiembre, pero con una apreciación limitada al 0,82 %.
El CAC-40 comenzó la sesión ligeramente por encima de los 6.707,32 puntos del cierre del jueves, pero a los pocos minutos se colocó en territorio negativo y antes de media mañana cayó hasta los 6.686,63 puntos, que sería el mínimo del día.
Las cosas empezaron a cambiar antes de mediodía, cuando el indicador volvió a progresar y se encaramó hasta los 6.725,00 puntos, el techo de la jornada.
La evolución siguió siendo irregular por la tarde, con el indicador de tendencia caracoleando en torno al punto de equilibrio. Terminó en 6.712,48 puntos, lo que significa que, más allá de haber ganado el citado 0,82 % en el conjunto de la semana, acumula ya una progresión del 7,18 % en un mes.
Es verdad que desde el punto bajo marcado en septiembre se ha recuperado un 20 % desde comienzos de año. Sin embargo, el mercado francés sigue con pérdidas del 6,34 %.
El parqué, un día más, estuvo poco animado como lo ilustra que sólo cambiaron de manos acciones por valor de 2.395 millones de euros.
En el frente de los valores del selectivo, las oscilaciones se mantuvieron a niveles muy moderados. Los ascensos más pronunciados fueron los de la petrolera TotalEnergies (1,07 %), la siderúrgica ArcelorMittal (BME:MTS) (0,75 %), el fabricante de motores aeronáuticos Safran (EPA:SAF) (0,67 %) y la farmacéutica Sanofi (EPA:SASY) (0,62 %).
En el otro extremo, Renault (EPA:RENA) destacó por haber sufrido la caída más fuerte (1,42 %). A continuación se situaron la inmobiliaria Unibail-Rodamco-Westfield (0,97 %), la compañía de bebidas y licores Pernod Ricard (EPA:PERP) (0,64 %) y el fabricante informático STMicroelectronics (EPA:STM) (0,61 %).