Madrid, 19 nov (.).- El índice de estrés de los mercados financieros españoles se mantiene en niveles bajos -cercanos al 0,20 %-, después del repunte que registró los primeros días de febrero, cuando se vio afectado por una mayor volatilidad tras un cambio de expectativas sobre la política monetaria de EEUU.
En la nota de Estabilidad Financiera e indicador de estrés de los mercados financieros españoles que publica trimestralmente la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) el supervisor señala que puede considerarse un nivel de estrés bajo en un ejercicio con ligeros repuntes.
Entre ellos, destaca el de febrero (0,27 %), por las turbulencias protagonizadas por las bolsas estadounidenses o los de junio y octubre, hasta 0,24 % y 0,22 %, respectivamente, que la CNMV relaciona con las dudas sobre las finanzas públicas en Italia y, en menor medida, con otras fuentes de incertidumbre, como la “guerra comercial” entre Estados Unidos y China, las tensiones en economías emergentes o la incertidumbre regulatoria.
Por segmentos, los niveles de estrés más altos se observan en el mercado de deuda y en el de intermediarios financieros, este último afectado por la caída de las cotizaciones de los bancos.
Aunque se observa cierta desaceleración de la actividad económica, la evolución macroeconómica en España sigue siendo positiva, con un crecimiento del PIB que se mantiene en el 2,5 %, el mismo porcentaje en que ha crecido el empleo.
Además, esta desaceleración es "menos intensa" que en la zona del euro, por lo que el diferencial de crecimiento a favor de España se ha incrementado hasta 8 décimas.
Entre las principales causas de incertidumbre que afectan a la economía española la nota destaca las restricciones que pueden afectar y ya lo están haciendo al comercio mundial, las dificultades que atraviesan algunas economías emergentes y las relacionadas con el contexto político, tanto europeo como nacional.
Asimismo, la CNMV se refiere a la necesidad de avanzar en el proceso de consolidación fiscal, especialmente cuando "un giro de la política monetaria está más cercano".