ROMA, 31 mar (Reuters) - El primer ministro italiano, Mario Draghi, dijo que había tratado con su homólogo español la idea de construir un gasoducto hacia España como parte de los planes para desligar a Europa del gas ruso.
"Está la idea del gasoducto Italia-España, que tratamos con (el jefe del Gobierno español Pedro) Sánchez en Roma y también en el Consejo Europeo", dijo Draghi el jueves.
España tiene la mayor capacidad de regasificación de Europa, pero el transporte del gas a Europa a través de los Pirineos ha sido un problema debido a los cuellos de botella.
Europa, que obtiene alrededor del 40% del suministro de gas de Rusia, ha estado luchando por encontrar alternativas y diversificar su combinación de suministros tras la invasión de Ucrania por parte de Moscú.
"Los países del sur del Mediterráneo de Europa se están dando cuenta de que pueden ser centros muy importantes para el gas hoy, pero también, y sobre todo, para el hidrógeno mañana", dijo Draghi en una conferencia de prensa.
El jueves, la empresa española de transporte de gas Enagas (MC:ENAG) dijo que estaba sopesando las opciones con Madrid y los operadores de los países vecinos para reforzar las interconexiones de España para transportar gas e hidrógeno.
Draghi dijo que, si bien la sustitución del 30-40% de los suministros rusos podría hacerse inmediatamente, sería mucho más difícil reemplazar el resto.
Italia, que tiene conexiones de gasoductos con Argelia, Libia y Azerbaiyán, está dispuesta a aumentar las importaciones de gas natural licuado para reducir su dependencia de Rusia.
"Hay otra hipótesis, el gasoducto EastMed... La Comisión Europea está estudiando la viabilidad del gasoducto", dijo Draghi.
El grupo energético controlado por el Estado, Eni (MI:ENI), ha dicho en el pasado que los proyectos de gas en países del este del Mediterráneo, como Egipto, Chipre e Israel, podrían ser clave para ayudar a Europa a diversificarse.
(Información de Crispian Balmer, información adicional de Isla Binnie en Madrid, redacción de Stephen Jewkes, edición de Gianluca Semeraro y Bernadette Baum, traducido por José Muñoz en la redacción de Gdansk)