Milán (Italia), 24 nov (.).- Endesa (MC:ELE) dejará todo su negocio de gas para 2040, tanto el de comercialización, en el que es el segundo operador del mercado español y tiene 1,6 millones de clientes, como la producción en ciclos combinados, para la que cuenta con 2.969 megavatios (MW) de potencia instalada en España y Portugal.
Su matriz, el grupo italiano Enel (MI:ENEI), ha anunciado este miércoles que abandonará la generación eléctrica partir de gas en 2040 y con carbón para 2027, sustituyendo su cartera termoeléctrica con nueva capacidad renovable y soluciones híbridas de almacenamiento de energías renovables.
El plan de Enel anticipa en diez años el compromiso de cero emisiones, de 2050 a 2040, tanto para las emisiones directas como indirectas, sin recurrir a medidas compensatorias, como las tecnologías de eliminación de CO2 o soluciones basadas en la naturaleza.
Endesa tiene actualmente 2.969 megavatios (MW) de potencia instalada en ciclos combinados para producir electricidad con gas, al que hay que sumar los 855 MW con los que cuenta en Portugal, lo que suma 3.824 MW en ciclos combinados en España y Portugal.
En España, Endesa cuenta con la central de San Roque, en Cádiz, con 408 MW; dos en Besòs (Barcelona), que suman 1.292 MW; el ciclo de Colón, en Huelva, con 398 MW, y en As Pontes (A Coruña), donde tiene también 1.469 MW de producción termoeléctrica con carbón, cuenta con un ciclo de gas de 870 MW.
Además, en comercialización, Endesa dispone de 1,6 millones de clientes de gas (familias y empresas) y es el segundo operador del mercado español, tras Naturgy (MC:NTGY).
El objetivo con la salida del gas es que el suministro de Endesa sea 100 % limpio en 2040, para lo que quedan diecinueve años.
Los planes de Endesa son que en determinados ámbitos de más difícil electrificación se utilice el hidrógeno, como en las islas Canarias; mientras que en Ceuta se solucionará con el cable de Red Eléctrica (MC:REE) que le unirá con la península, y en Melilla está pendiente de decidir la solución que se adoptará.
En la presentación del plan estratégico de Enel, su consejero delegado, Francesco Starace, ha dicho: "La electrificación es el futuro (...) Seguiremos creciendo en renovables, creando valor de lo que ya es la primera cartera de activos renovables en el mundo".
Para 2040, el grupo quiere abandonar el negocio minorista del gas con la intención de que la electricidad vendida sea producida íntegramente a partir de energías renovables. Hasta 2030, el grupo prevé inversiones directas por valor de 170.000 millones de euros, un 6 % más respecto a las contempladas en el plan de 2021-2023.
De este monto, 70.000 millones irán para energía renovable, con la intención de alcanzar una capacidad total de alrededor de 154 gigavatios, y otros tantos estarán reservados para infraestructuras y redes, lo que supone un aumento de 10.000 millones de euros en comparación con el plan anterior.
A estos 170.000 millones de inversiones directas, el grupo pretende sumar otros 40.000 millones de euros captados de terceros, elevando la inversión total a 210.000 millones.
Las inversiones, explicó Enel, reducirán los costos de energía para los clientes en un 40 % y ayudarán a reducir la huella de carbono en un 80 % para 2030. El grupo también aspira a incrementar sus clientes de la red en un 16 %, sumando 12 millones, y elevar sus ventas de electricidad en casi un 30 %.