Nueva York, 2 jul (.).- La principal compañía petrolera estadounidense, Exxon Mobil (NYSE:XOM), anunció este jueves que volverá a sufrir fuertes pérdidas en sus operaciones de refinado y producción de petróleo y gas en el segundo trimestre, cuyos resultados tiene previsto publicar para finales de julio.
Exxon calculó que la caída de los precios del petroleo y del gas supondrán unas pérdidas de entre 2.500 y 3.000 millones de dólares, en comparación con el primer trimestre en el que los beneficios en estas áreas fueron de 536 millones, de acuerdo con un documento regulatorio publicado esta mañana.
En concreto la empresa petrolera calcula que las pérdidas por la caída de los precios del oro negro podrían rondar entre los 2.500 y los 2.100 millones de dólares, mientras que la del gas estaría entre 500 y 400 millones.
Asimismo, Exxon apunta en el documento pérdidas en otras áreas como la producción de combustibles como la gasolina y el diésel y por los mayores costes debido a las operaciones logísticas relativas al crudo en Norteamérica. En total, estas áreas registraron unas pérdidas de entre 800 millones y 1.200 millones.
A pesar de esta advertencia, su valor en la Bolsa de Valores de Nueva York experimentaba un aumento a media sesión de este jueves, con una subida del 1,51 %.
La caída de la actividad comercial y empresarial, así como de los viajes de largo recorrido en todo el mundo debido a la pandemia, han afectado negativamente a los precios del petróleo, que sufrieron una caída récord en los meses pasados.
Los analistas esperan que Exxon, que dará a conocer sus resultados el 31 de julio, anuncie una pérdida de unos 2.300 millones de dólares en el segundo trimestre, según FactSet (NYSE:FDS).
El pasado mayo, Exxon registró en el primer trimestre del año pérdidas por primera vez en décadas, impactada por la caída en la demanda que ha provocado la pandemia del COVID-19.
Exxon, con sede en Irving (Texas), perdió 610 millones de dólares entre enero y marzo, un mal resultado trimestral que no se veía desde hacía 32 años y que contrasta con los 2.350 millones que ganó en el mismo tramo de 2019. Además, tuvo un descenso de facturación cercano al 12 % interanual, hasta los 56.158 millones.
En respuesta a las consecuencias de la crisis, Exxon anunció tras el primer trimestre un recorte de gastos de capital del 30 % hasta finales de año -se sitúan ahora en 23.000 millones- y una reducción en los gastos de operación en efectivo del 15 %.