Madrid, 30 abr (.).- Faes Farma (MC:FAE) obtuvo un beneficio neto de 21,5 millones de euros entre enero y marzo de 2021, lo que supone un 3,1 % más que un año antes, y un resultado récord en un trimestre.
El resultado bruto de explotación (ebitda) se redujo un 1,6 % hasta marzo con 29,9 millones de euros, según las cuentas remitidas por la compañía farmacéutica a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Los ingresos de Faes Farma en los tres primeros meses del ejercicio sumaron 105 millones, el 14,4 % menos que en 2020, pese a los incrementos significativos de ventas globales del 29 % en Calcifediol y del 7 % en Mesalazina y tras la importante reducción de las ventas a Taiho (Japón) por el efecto del exceso de "stock" derivado de 2020.
En España los ingresos se redujeron un 9 % hasta los 42 millones de euros. Las ventas de Calcifediol subieron un 24 % hasta los 10 millones. Por el contrario, las de Bilastina cayeron el 11 % hasta los 7 millones; las de Mesalazina un 14 %, con 2 millones, y el resto de productos lo hizo un 17 %, hasta los 23 millones.
En Portugal las ventas se redujeron un 36 %, hasta los 6,6 millones, debido al retroceso en el mercado de farmacia y "consumer", aunque la compañía tiene unas expectativas más optimistas de cara al segundo trimestre.
Latinoamérica se mantuvo como el principal motor de crecimiento internacional con un 12 % más de ingresos, y la adquisición de Global Farma (Centroamérica Dominicana) contribuye desde marzo con 1,6 millones en las ventas.
Por lo que respecta al negocio de nutrición y salud animal, los ingresos cedieron un 6 %, hasta los 14,1 millones, como consecuencia del efecto acopio que se hizo en marzo 2020 y que se ajustó en los meses posteriores.
A consecuencia de las inversiones, la liquidez se redujo a 56 millones frente a los 91 millones de cierre de 2020.
Faes Farma espera un mayor impacto coyuntural del coronavirus en el primer semestre de 2021, con una progresiva normalización en la segunda mitad del año y una acumulación de "stocks" de Bilastina como consecuencia de la contracción del mercado de antihistamínicos en 2020 por la covid-19.
Se espera que las ventas netas crezcan un dígito y que el beneficio antes de impuestos se sitúe entre los 87 y los 91 millones de euros, lo que supondría un aumento respecto a los 85 millones logrados en 2020.