Por Nidal al-Mughrabi y Maayan Lubell
GAZA/JERUSALÉN (Reuters) - Las negociaciones para acabar con la guerra que se prolonga desde hace un mes entre Israel y los islamistas en Gaza son "difíciles", dijeron delegados palestinos el martes, mientras que responsables israelíes afirmaron que no se habían producido avances hasta el momento y que la confrontación podría reanudarse pronto.
Mientras se mantenía un alto el fuego de 72 horas por segundo día, negociadores palestinos iniciaban nuevas conversaciones con responsables de inteligencia egipcios tras una reunión de nueve horas el lunes.
Hamás, el grupo islamista que domina la Franja de Gaza, y sus aliados están buscando poner fin a un bloqueo israelí y egipcio al enclave costero palestino.
"Afrontamos unas negociaciones difíciles", dijo a través de Twitter el líder de Hamás en El Cairo, Musa Abu Marzuk.
Un responsable israelí, que pidió no ser identificado, dijo que las diferencias entre los dos bandos eran grandes. "No hay progreso en las negociaciones", afirmó.
El ministro de Defensa, Moshe Yaalon, dijo a las fuerzas armadas israelíes que se preparasen para una posible reanudación de las hostilidades.
"No sé si para la medianoche del miércoles habremos llegado a un acuerdo. No sé si necesitaremos ampliar las negociaciones. Podría ser que vuelvan los disparos (de cohetes) y volveremos a responderles", dijo durante una visita a una base naval.
Un responsable palestino con conocimiento de las conversaciones de El Cairo dijo a Reuters, bajo condición de anonimato: "Hasta ahora no podemos decir que se haya logrado un gran avance (...) Venticuatro horas y veremos si tenemos un acuerdo".
Hamas también quiere que se abra un puerto marítimo en Gaza, un proyecto que Israel dice que debería tratarse sólo en negociaciones sobre un acuerdo permanente con los palestinos.
Israel se ha resistido a levantar su asfixiante bloqueo económico sobre Gaza y sospecha que Hamas se reabastecerá con armas del extranjero si se facilita el acceso a la Franja. El vecino Egipto también ve a Hamas como una amenaza para su seguridad.
Israel retiró a fuerzas de terrestres de Gaza la semana pasada tras decir que el Ejército había completado su misión principal de destruir más de 30 túneles construidos por militantes para lanzar ataques transfronterizos.
El responsable palestino dijo que la delegación palestina había acordado que la reconstrucción en Gaza debe ser realizada por el Gobierno de unidad de tecnócratas establecido en junio por Hamás y por el partido secular Fatah, del presidente Mahmud Abas, con sede en Cisjordania.
INVESTIGACIÓN POR CRÍMENES DE GUERRA
En Gaza, muchas familias han vuelto a zonas de las que fueron forzadas a salir por el Ejército israelí, pero algunas encontraron que sus casas habían sido bombardeadas.
El personal del hospital de Gaza afirmó que 1.938 palestinos, la mayoría de ellos civiles, han muerto desde que Israel lanzó su campaña militar el 8 de julio para poner fin al lanzamiento de cohetes desde el enclave.
Israel ha perdido a 64 soldados y a tres civiles, mientras que la alta cantidad de muertos civiles y la destrucción de miles de casas en Gaza -hogar de 1,8 millones de palestinos en un estrecho enclave- han provocado la condena internacional.
En Ginebra, Naciones Unidas nombró a una comisión internacional para investigar posibles violaciones a los derechos humanos y crímenes de guerra cometidos por ambas partes durante el conflicto.
La designación de la comisión, que estará encabezada por el profesor canadiense de derecho internacional William Schabas, fue recibida con beneplácito por Hamás, pero criticada por Israel.