Madrid, 2 dic (.).- La bolsa española ha acabado con una racha de seis semanas consecutivas al alza, al perder en este período el 0,4 % al empantanarse esa tendencia alcista por la situación de la pandemia de covid-19 en China y por los datos de empleo estadounidenses de noviembre, según datos del mercado.
El mercado nacional recogía beneficios al comienzo de la semana y cedía el 1,1 %, caída que ha condicionado en gran medida el resultado de este período.
Ese retroceso estaba influido por el aumento de los casos de covid-19 en China y por su incidencia en la economía global, por los nuevos confinamientos, las revueltas y los problemas que podrían causar en las cadenas de suministros.
Sin embargo, el país asiático anunciaba algún cambio en su política para contener la pandemia, como incrementar la vacunación de las personas mayores y relajar las medidas de covid 0 y cambiaba la tendencia bursátil en parte de los días siguientes.
Para el analista de IG Diego Morin, a esa tendencia contribuyó la rebaja del tono agresivo de la Reserva Federal expresado el miércoles por su presidente, Jerome Powell, que podría llevar a que los tipos de interés en Estados Unidos suban medio punto en la reunión de este mes (en los cuatro encuentros anteriores aumentaron 0,75 puntos), aunque dijo que se mantendrían a un nivel alto más tiempo del previsto.
Además, ha destacado que la evolución de las plazas española y europeas se ha caracterizado por un estancamiento en la zona de los máximos de noviembre, alrededor de 8.400 puntos en el caso nacional, y con el euro en torno a 1,045 dólares.
La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, advertía de que los efectos de las subidas de los tipos de interés "tardarán algún tiempo en sentirse en la economía".
Esta semana se han conocido datos sobre la desaceleración de la inflación: el IPC español de noviembre bajaba medio punto, hasta el 6,8 %, en tanto que en Alemania y en la zona euro (en este área baja por primera vez desde junio de 2021) descendía cuatro décimas, hasta el 10 %.
De Estados Unidos llegaban estadísticas contradictorias, aunque en general indicaban la desaceleración de la actividad en el país (descenso de la confianza de los consumidores, caída del paro ADP, de la actividad manufacturera).
Sin embargo, los datos públicos de empleo de noviembre de ese país mostraban una creación superior a lo esperado de puestos de trabajo, 263.000, dos mil más que en octubre, lo que este viernes provocaba pérdidas en las bolsas.
También su PIB del tercer trimestre se elevaba una décima respecto al adelantado y se situaba en el 0,7 % (en tasa interanual aumentó tres décimas, hasta el 2,9 %), lo que podía condicionar la relajación de los tipos de interés.
En Asia bajaba la actividad manufacturera en Japón y China el mes pasado, mientras que en Europa remontaba levemente, aunque se mantenía en zona contractiva (por debajo de 50 puntos).
En cuanto a la evolución semanal de las plazas internacionales, en Europa también bajaron Milán y Fráncfort, el 0,39 % y el 0,08 %, respectivamente; en tanto que Londres subió el 0,93 % y París el 0,44 %.
En Asia, Tokio perdió el 1,79 % semanal y Hong Kong avanzó el 6,39 %; mientras que en Wall Street, el índice Dow Jones apenas variaba sobre el cierre de la semana pasada, el S&P 500 avanzaba alrededor del 0,9 % y el Nasdaq Composite el 1,5 %.
De los grandes valores de la bolsa española, los integrantes del IBEX 35, Telefónica (BME:TEF) ha perdido el 2 %, Banco Santander (BME:SAN) el 0,72 %, BBVA (BME:BBVA) el 0,51 % y Repsol (BME:REP) el 0,34 %. Han subido Iberdrola (BME:IBE), el 0,28 %, e Inditex (BME:ITX) el 1,32 %.
Las mayores bajadas del IBEX han correspondido a PharmaMar (BME:PHMR), el 6,09 %; seguida de Indra (BME:IDR), con un alza del 5,55 %; y de Sacyr (BME:SCYR), el 4,1 %. En el lado contrario se han situado Caixabank (BME:CABK), al caer el 4,33 %; mientras que Acciona (BME:ANA) ha cedido el 3,84 % y Redeia el 3,62 %.
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