Por Laura Sánchez
Investing.com - Sesión en rojo para los índices europeos este miércoles, arrastrados por los índices asiáticos en rojo y por los descensos de más del 2% del sector tecnológico europeo.
Las tecnológicas estadounidenses también caían en el after hours después de registrar ascensos en la sesión de ayer.
Y es que los altos precios de la energía vuelven a disparar los temores por la inflación.
El petróleo crudo WTI supera los 79 dólares (máximos de 2014) y el Brent los 83 (su nivel más alto en 3 años).
El gas natural de Estados Unidos también se sitúa en máximos desde 2008. “La demanda aumenta antes de la temporada de invierno en el hemisferio norte y los inventarios se mantienen en niveles históricamente bajos”, comenta Sergio Ávila, analista de mercados de IG.
El bono americano a 10 años vuelve a caer con rentabilidades ya del 1,57%. “La amplitud en el mercado de bonos high-yield comienza a mostrar ya ciertas divergencias preocupantes que puede indicarnos que los institucionales están reduciendo la liquidez en el mercado”, añade Ávila.
“Factores como la alta inflación, los problemas por los que atraviesa el sector inmobiliario chino o el riesgo de que el Congreso de EE.UU. no alcance un acuerdo a tiempo para incrementar el techo de deuda creemos que seguirán pesando en el ánimo de los inversores, generando mucha volatilidad en los mercados de valores y haciendo poco factible que los rebotes puntuales de los índices puedan consolidarse, al menos en el muy corto plazo”, resaltan en Link Securities.
En Bankinter (MC:BKT) esperan una sesión de toma de beneficios. “En nuestra opinión, la evolución de las rentabilidades de los bonos es un proceso de ajuste en una fase de aceleración del crecimiento y las señales sobre la velocidad de este crecimiento procederán hoy del mercado laboral”.
“Lo importantes es que el fondo de mercado sigue siendo positivo, aunque el camino no estará exento de volatilidad (ante la variedad de expectativas sobre el timing y ritmo del tapering y otras incertidumbres pendientes como los cuellos de botella en el sector manufacturero o los problemas en inmobiliarias chinas)”, añaden estos analistas.
A todo esta situación de tensión se añade que el Banco Central de Nueva Zelanda ha subido esta madrugada los tipos de interés en 25 puntos básicos, del 0,25% al 0,50%. “Aunque era un movimiento esperado, no deja de ser un signo más del cambio en la política monetaria”, concluyen en Bankinter.