Por Wayne Cole
SÍDNEY, 8 abr (Reuters) - Los mercados bursátiles asiáticos se rezagaban el jueves, mientras los futuros de las bolsas estadounidenses alcanzaban nuevos máximos después de que la Reserva Federal subrayara su compromiso de mantener una estrategia súper flexible, aunque la economía disfrute de una rápida recuperación.
El índice MSCI de acciones de Asia-Pacífico sin incluir Japón subía un 0,2% en una sesión con volumen limitado. Los movimientos eran modestos en toda la región, con los valores chinos subiendo un 0,1% y Corea del Sur sin cambios.
El Nikkei japonés bajaba un 0,3%, sin que le ayudara la noticia de que el gobernador de Tokio había pedido medidas de emergencia para frenar un aumento de las infecciones por COVID-19.
El rendimiento superior de la economía estadounidense contribuía a que los futuros del S&P 500 subieran un 0,4%, hasta un nuevo máximo, mientras que los futuros del Nasdaq ganaban un 0,7%. Los futuros del EUROSTOXX 50 avanzaban un 0,4% y los del FTSE un 0,3%.
Las actas de la última reunión de política monetaria de la Reserva Federal mostraron que sus miembros consideran que la economía aún está lejos de su objetivo y no tienen prisa por reducir su compra de bonos por valor de 120.000 millones de dólares al mes.
El presidente de la Fed, Jerome Powell, hablará en un evento del FMI el jueves y es probable que reitere la perspectiva favorable a la relajación monetaria.
"Este debate coincide con nuestra opinión de que la Fed no empezará a hablar de retirar los estímulos hasta finales de este año, y que los cambios reales en el ritmo de compras no se producirán hasta el primer trimestre de 2022", dijeron los analistas de JPMorgan (NYSE:JPM).
"Los dirigentes de la Fed consideraron en general que la reciente subida de los rendimientos de los bonos del Tesoro a más largo plazo respondía a una mejora de las perspectivas y a un cierto afianzamiento de las expectativas de inflación, y no a un riesgo para las perspectivas."
Los rendimientos de los bonos del Tesoro a 10 años han retrocedido desde entonces un poco, hasta el 1,669%, desde el máximo de 14 meses alcanzado recientemente, al 1,776%, pero han tenido dificultades para bajar del 1,59%.
Este retroceso coincidió con una caída del índice del dólar a 92,382, desde su reciente máximo de cinco meses en 93,439. El dólar también se mantenía en 109,70 yenes, después de haber perdido su máximo de un año de 110,96.
El euro se mantenía estable en 1,1874 dólares, después de haber alcanzado un máximo de 1,1914 dólares durante la noche tras una encuesta sorprendentemente optimista sobre la actividad empresarial de la Unión Europea.
"La mejora del virus y de las expectativas de crecimiento ha estimulado la confianza de los consumidores y de las empresas, impulsando la demanda nacional y mundial de productos manufacturados", señalan los analistas de Barclays (LON:BARC) en una nota.
"Este fenómeno es generalizado en todas las economías europeas".
En los mercados de materias primas, el oro permanecía estancado en los 1.738 dólares la onza tras encontrar resistencia en torno a los 1.745 dólares.
Los precios del petróleo bajaban, pero seguían dentro de una estrecha franja comercial que se ha mantenido durante las dos últimas semanas aproximadamente. [O/R]
El Brent caía 33 centavos a 62,83 dólares el barril, mientras que el crudo estadounidense perdía 37 centavos a 59,40 dólares el barril.
(Información adicional de Chibuike Oguh; edición de Ana Nicolaci da Costa y Jacqueline Wong, traducido por Tomás Cobos)