Por Carlos R. Cózar
Investing.com - La compañía de transporte privado con conductor, Uber (NYSE:UBER), no ha comenzado de la mejor manera posible su debut en bolsa.
Las caídas durante el viernes fueron holgadas, y sus acciones se hundieron un 7,62%. Así, este lunes los títulos han comenzado a cotizar en los 41,57 dólares frente a los 45 dólares que fijó el pasado jueves la compañía el precio de la acción.
Tras el duro batacazo, la tónica se ha repetido el lunes y ha abierto con descensos del más del 6,9%. Esto significa que la valoración de Uber sobre el parqué ya queda por debajo de los 71.200 millones de dólares.
En la primera sesión, la compañía tecnológica perdió más de 6.000 millones de dólares y, de acabar así esta jornada, podría dejarse otros 6.000 millones de dólares.
Cabe destacar que hasta hace unas semanas la capitalización de Uber era de más de 100.000 millones. A pesar del desplome, la compañía consiguió recaudar más de 8.100 millones de dólares, una de las más importantes sobre el parqué norteamericano y la tercera mayor del sector tecnológico desde Alibaba (NYSE:BABA) y Facebook (NASDAQ:FB).
Siguiendo los pasos de Lyft (NASDAQ:LYFT)
La salida a bolsa de Uber se ha producido poco más de un mes después de que su principal competidora se financiase con el mercado. El comportamiento sobre el parqué, además, se está pareciendo de manera notable respecto a la de Lyft.
Desde el 29 de marzo, que comenzó a cotizar, Lyft se ha desplomado un 34%. El viernes pasado se quedó en los 51,09 dólares frente a los 78,29% con los que se estrenó en bolsa.
Este lunes también pinta negro para Lyft. A inicio de sesión, la rival de Uber se deja por el camino otro 3%, lo que se traduce en perder la barrera de los 50 dólares, quedándose así en los 49,55 dólares.
Este mal inicio sobre el parqué ya fue advertido por los analistas. El analista de Investing.com, Clement Thibault, subraya que en las empresas enfocadas al crecimiento “los inversores se muestran rápidamente insatisfechos cuando el crecimiento empieza a reducirse o cuando las pérdidas empiezan a acumularse”.
Haris Anwar, analista de Investing.com, también pone en duda el hecho de comprar acciones, “al menos durante los primeros seis meses”. “La OPV de Uber ofrece una buena oportunidad para hacerse con un pedazo de una empresa que se encuentra en el eje de la revolución del transporte, pero no creemos que comprar sus acciones poco después de su salida a bolsa sea una buena idea. Mejor esperar al menos seis meses para ver cómo les va a las acciones y conocer los resultados trimestrales de la empresa. Lo más probable es que obtenga mejores resultados si espera hasta que pase todo este revuelo”, valora.
No obstante, el mismo experto explicaba que “Uber podría recompensar a sus inversores a largo plazo, pero sus acciones nos parecen caras pues su precio de OPV está fijado en el punto medio del rango de precio de Uber, entre 44 y 50 dólares por acción”.
Para defender las caídas, el CEO de la compañía, Dara Khosrowshahi, dijo el pasado viernes que el foco está en la rentabilidad y ha atribuyó las caídas iniciales al mal día de Wall Street por las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China.