BRASILIA, 2 mar (Reuters) - El presidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva criticó el jueves al Banco Central por la actual tasa de interés y advirtió de que Brasil podría sufrir "pronto" una crisis crediticia si la autoridad monetaria no reduce las tasas de interés.
Lula volvió a decir que no hay explicación para la tasa de interés del 13,75% anual, alegando que no hay inflación al consumidor en Brasil, y cargó contra el presidente del Banco Central, Roberto Campos Neto, para que reduzca la tasa.
"Este ciudadano que no fue elegido para nada cree que tiene el poder de decidir las cosas", dijo Lula en una entrevista con el periodista de BandNews Reinaldo Azevedo. "Este país no puede ser rehén de un solo hombre".
Lula y ministros del Gobierno como Fernando Haddad, del Ministerio de Hacienda, y Simone Tebet, de Planificación, han hecho una serie de críticas a la conducción de la política monetaria por parte del Banco Central y al actual nivel de la tasa básica de interés, la Selic.
Según el titular de Hacienda, la retracción del PIB verificada en el último trimestre de 2022, divulgada este mismo jueves, es reflejo de la subida de las tasas de interés promovida por el Banco Central como reacción a las medidas tomadas por el anterior Gobierno durante el periodo electoral.
El ministro ya había afirmado la víspera que la tasa de interés es hoy el mayor problema económico del país.
En la entrevista con Azevedo, Lula también dijo que todas las decisiones tomadas por el Gobierno pasan por él y que, por lo tanto, son decisiones políticas, rechazando que haya habido una victoria del área económica sobre la política en la decisión de volver a gravar la gasolina y el etanol.
El martes, el Gobierno anunció la exoneración de gasolina y etanol tras el fin de una exención tributaria que terminó el 28 de febrero, en lo que fue apuntado como una victoria de Haddad sobre partes del Gobierno y del PT (OTC:PTGCY) que estaban en frente de la exoneración, vista como impopular y con posible impacto inflacionario.
"No hubo victoria económica sobre la política porque todas las decisiones pasan por mí. Como todas las decisiones pasan por mí, las decisiones son políticas", dijo Lula.
El presidente también reiteró sus críticas a Petrobras (NYSE:PBR) por la cantidad de dividendos pagados a los accionistas y dijo que Brasil podría tener una empresa pública de economía mixta "de mayor calidad" que pudiera inducir el crecimiento a través de la inversión.
Anteriormente, en un acto de relanzamiento de Bolsa Família, Lula dijo que no se puede aceptar que Petrobras pague 215.000 millones de reales en dividendos este año "cuando debería haber invertido la mitad en el crecimiento económico de este país, en la industria brasileña, en la industria naval, en la industria del petróleo y del gas".
(Reporte de Maria Carolina Marcello; escrito por Pedro Fonseca; editado en español por Aida Peláez-Fernández)