El polémico gurú indio acusado la semana pasada de violar a varias devotas ha sido condenado este lunes a diez años de prisión. La sentencia se ha dado a conocer bajo fuertes medidas de seguridad con el despligue de 2.000 policías y 23 compañías paramilitares en el distrito de Rohtak, cerca de la cárcel de Sunaria donde se encuentra el gurú, que cuenta con millones de seguidores. De hecho el magistrado encargado de leer el fallo se ha tenido que trasladar en helicóptero hasta la cárcel.