LONDRES, 22 oct (Reuters) -Renault dijo el viernes que reduciría su producción en 500.000 vehículos este año, más del doble de su previsión anterior, debido a la escasez de semiconductores en todo el mundo, pero mantuvo sus perspectivas de beneficios gracias al aumento de los precios de los automóviles y a los recortes de costes.
Durante una presentación a los analistas, la directora financiera de Renault (PA:RENA), Clotlide Delbos, dijo que las expectativas del fabricante de automóviles sobre la escasez de semiconductores en el cuarto trimestre eran "todavía muy pobres porque la información que llega de los proveedores es muy poco fiable".
Según Delbos, la escasez de semiconductores debería aliviarse un poco a finales de año con el fin del confinamiento de COVID-19 en Malasia, clave para el suministro mundial de chips, pero seguiría siendo limitada durante gran parte de 2022.
Cuando se le preguntó por otras materias primas, Delbos dijo que Renault no sufría escasez, pero sí aumentos de precios.
La escasez de semiconductores, utilizados en todo tipo de elementos, desde los sensores de freno hasta la dirección asistida o los sistemas de entretenimiento, ha llevado a los fabricantes de automóviles de todo el mundo a reducir o incluso suspender la producción, lo que ha hecho subir los precios de los vehículos.
Al igual que sus rivales, Renault ha centrado su producción en modelos más rentables.
El sombrío pronóstico del fabricante de automóviles francés es más del doble de las 220.000 unidades previstas a principios de septiembre y representa alrededor del 13% de los 3,75 millones de vehículos que Renault vendió en 2019 antes de la pandemia.
Fuentes cercanas a la empresa habían dicho a Reuters esta semana que las pérdidas de producción serían mucho mayores de lo previsto anteriormente.
Las acciones de la compañía bajaban un 1,7% a las 0831 GMT, siendo la que más caía en el mercado bursátil CAC-40 de París, que subía un 1%.
TIEMPO DE ESPERA
El fabricante de automóviles dijo que su cartera de pedidos alcanzó un máximo de 15 años a finales de septiembre por el equivalente a 2,8 meses de ventas.
La directora financiera Delbos dijo que el tiempo de espera para el Dacia Sandero, un popular automóvil urbano de bajo coste, era ahora de seis meses.
Durante el tercer trimestre, los modelos totalmente eléctricos, híbridos enchufables e híbridos representaron más del 31% de las ventas, dijo Renault.
El fabricante de automóviles está en camino de cumplir los objetivos europeos de emisiones de CO2 más estrictos de 2021, añadió.
Renault dijo que los ingresos del tercer trimestre habían caído un 13,4%, hasta 8.980 millones de euros (10.400 millones de dólares), frente a los 10.370 millones del año anterior, aunque el aumento de los precios de los automóviles ayudó a compensar parte de la caída del 22,3% en las ventas mundiales.
Delbos dijo que la empresa completaría un plan de reducción de costes de 2.000 millones de euros en las próximas semanas, más de un año antes de lo previsto, y que pretendía acelerar otros planes de reducción de costes.
El fabricante de automóviles dijo que lograría un flujo de caja libre positivo para su negocio de automoción para 2021, excluyendo los cambios en las necesidades de capital circulante. Ese objetivo de flujo de caja se verá impulsado por un dividendo de 930 millones de euros de su brazo financiero RCI Banque, dijo Delbos.
Renault dijo que los inventarios de vehículos habían caído a 340.000 automóviles al final del trimestre desde 470.000 un año antes.
(1$=0,8601 euros)
(Reporte de Nick Carey; edición de Christian Schmollinger y Subhranshu Sahu, traducido por José Muñoz en la redacción de Gdansk)