Toyota Motor Corporation, que cotiza en la Bolsa de Nueva York bajo el ticker NYSE:TM, y su filial Toyota Industries, listada como OTC:TYIDF, se enfrentan a una demanda colectiva propuesta en Estados Unidos. La acción legal, interpuesta por compradores de montacargas, acusa al fabricante japonés de manipular las pruebas de emisiones de nueve motores diferentes utilizados en sus vehículos industriales. La demanda se presentó el domingo por la noche en un tribunal federal de San Francisco.
La acusación surge tras una investigación interna de Toyota a principios de este año, que destapó prácticas como la alteración de software o el intercambio de motores durante las pruebas de emisiones. Estas modificaciones hacían que los montacargas parecieran tener un mejor rendimiento en condiciones de prueba que en circunstancias normales de operación. Como consecuencia de estos hallazgos, Toyota suspendió la venta de algunos montacargas en Japón en marzo de 2023 debido a las discrepancias en las emisiones.
Entre los demandantes se encuentran Broadmoor Lumber & Plywood, Marders y Ferraro Foods —una empresa de suministros para paisajismo, un vivero y un distribuidor de alimentos italianos, respectivamente—. Estos afirman que no habrían adquirido los montacargas de Toyota si hubieran sabido que los vehículos incumplían los estándares de emisiones y tenían un rendimiento inferior al esperado.
La demanda alega que la "cultura tóxica de fraude, negligencia e incumplimiento" de Toyota afectó a las certificaciones de motores a nivel mundial, incluyendo Estados Unidos. Esta afirmación se realiza a pesar de que la Agencia de Protección Ambiental de EE. UU. no ha tomado ninguna medida de cumplimiento hasta la fecha, aunque el problema salió a la luz tras una investigación de la agencia.
Los demandantes solicitan daños compensatorios y punitivos no especificados, así como reembolsos íntegros por los montacargas afectados. Hasta el lunes, Toyota no había emitido comentarios sobre la demanda, y los abogados de los demandantes tampoco habían proporcionado declaraciones adicionales.
La investigación interna en Toyota Industries, el mayor fabricante de montacargas del mundo, identificó una "mentalidad de contratista" dentro de la división de motores y una cultura que restaba importancia a los vehículos industriales, lo que condujo a una falta de atención adecuada a las normativas de emisiones.
El caso, presentado bajo el nombre de Broadmoor Lumber & Plywood Co et al v Toyota Industries Corp et al, se está llevando a cabo en el Tribunal de Distrito de EE. UU. para el Distrito Norte de California, con el número de expediente 24-06640.
Reuters contribuyó a este artículo.
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