RIAD (Reuters) - Un tribunal saudí condenó a muerte el lunes a un hombre y hasta a 30 años de prisión a otros 13 por su responsabilidad en una serie de ataques contra objetivos del Gobierno y extranjeros en la última década, dijeron medios estatales.
Los condenados formaban parte de un grupo de 50 procesados en una célula extremista y están acusados de asesinato y secuestro, así como de poner bombas en coches, edificios del Gobierno y complejos residenciales de extranjeros, y tramar el asesinato de responsables del Gobierno y atacar embajadas.
Los periodos de cárcel para los acusados va desde los cuatro a los 30 años. La sentencia de otros dos integrantes del grupo se retrasó para permitir nuevas pruebas, dijo la agencia de prensa saudí a última hora del lunes. Los 34 restantes fueron absueltos.
Arabia Saudí ha detenido a miles de ciudadanos y ha sentenciado a centenares de ellos tras una campaña de atentados entre 2003 y 2006 por parte de un grupo de Al Qaeda que mató a cientos de personas.
La preocupación de Riad por los insurgentes en su país ha aumentado a medida que las guerras de Siria e Irak han llevado a lo que los responsables describen como un incremento en la radicalización entre sus ciudadanos, que ha llevado a varios de sus jóvenes a viajar al extranjero para combatir.
En febrero, el rey Abdulá emitió un decreto real que imponía prisión para cualquier saudí que viaje al extranjero a combatir o que aliente o ayude a otros a hacerlo.