Por Jihoon Lee
SEÚL, 25 sep (Reuters) -Corea del Norte disparó el domingo un misil balístico hacia el mar frente a su costa oriental, antes de las maniobras militares previstas por las fuerzas surcoreanas y estadounidenses con un portaaviones y de la visita a la región de la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris.
El Ejército de Corea del Sur dijo que se trataba de un único misil balístico de corto alcance disparado desde cerca de la zona de Taechon, en la provincia de Pyongyan del Norte, poco antes de las 7 de la mañana hora local (2200 GMT del sábado).
El ministro de Defensa japonés, Yasukazu Hamada, dijo que Tokio estima que alcanzó una altitud máxima de 50 km y que podría haber volado en una trayectoria irregular. Hamada dijo que cayó fuera de la zona económica exclusiva de Japón y que no se informó de problemas con el tráfico marítimo o aéreo.
Muchos de los misiles de corto alcance probados por Corea del Norte en los últimos años han sido diseñados para eludir las defensas antimisiles maniobrando durante el vuelo y volando en una trayectoria más baja y "deprimida", según los expertos.
"Si se incluyen los lanzamientos de misiles de crucero, este es el decimonoveno lanzamiento, lo que supone un ritmo sin precedentes. La acción de Corea del Norte representa una amenaza para la paz y la seguridad de nuestro país, de la región y de la comunidad internacional, y hacer esto mientras se desarrolla la invasión a Ucrania es imperdonable", dijo Hamada, añadiendo que Japón había entregado una protesta a través de la embajada de Corea del Norte en Pekín.
El lanzamiento se produce tras la llegada del portaaviones de propulsión nuclear estadounidense USS Ronald Reagan a Corea del Sur para participar en ejercicios conjuntos con las fuerzas surcoreanas, y antes de una visita prevista a Seúl esta semana de Harris.
Es la primera vez que Corea del Norte realiza un lanzamiento de este tipo desde que disparó ocho misiles balísticos de corto alcance en un día a principios de junio, lo que llevó a Estados Unidos a pedir más sanciones por violar las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
Corea del Norte rechaza las resoluciones de la ONU por considerarlas una violación de su derecho soberano a la autodefensa y a la exploración del espacio, y ha criticado anteriores simulacros conjuntos de Estados Unidos y Corea del Sur como prueba de su política hostil.
Los simulacros también han sido criticados por Rusia y China, que han pedido a todas las partes que no tomen medidas que aumenten las tensiones en la región, y han solicitado que se suavicen las sanciones.
Después de que Corea del Norte llevó a cabo un número sin precedentes de pruebas de misiles a principios de este año, incluyendo sus misiles balísticos intercontinentales por primera vez desde 2017, Estados Unidos y Corea del Sur dijeron que impulsarían los simulacros conjuntos y las demostraciones militares de poder para disuadir a Pyongyang.
"Los ejercicios de defensa no van a impedir las pruebas de misiles de Corea del Norte", dijo Leif-Eric Easley, profesor de asuntos internacionales en la Universidad Ewha de Seúl.
Pero la cooperación en materia de seguridad entre Estados Unidos y Corea del Sur ayuda a disuadir un ataque norcoreano y a contrarrestar la coerción de Pyongyang, y los aliados no deben dejar que las provocaciones les impidan realizar el entrenamiento militar y los intercambios necesarios para mantener la alianza, añadió.
La agencia de noticias surcoreana Yonhap informó el sábado que Corea del Norte podría estar preparándose también para probar un misil balístico lanzado desde un submarino (SLBM), citando a militares de Corea del Sur.
(Reporte de Jihoon Lee; reporte adicional de Josh Smith y Tim Kelly; Editado en Español por Ricardo Figueroa)