Por Humeyra Pamuk
HANOI, 15 abr (Reuters) - El primer ministro vietnamita, Pham Minh Chinh, y el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, expresaron el sábado su deseo de estrechar sus lazos, en un momento en que Washington busca consolidar alianzas para contrarrestar a una China cada vez más firme.
En su primera visita al país del sudeste asiático como máximo responsable de la diplomacia estadounidense, Blinken se reunió con altos cargos, entre ellos el secretario general vietnamita, Nguyen Phu Trong, y el primer ministro, Pham Minh Chinh. El tema principal fue la posibilidad de mejorar los lazos bilaterales.
"Para el presidente Biden, para Washington, ésta es una de las relaciones más dinámicas y más importantes que hemos tenido", dijo Blinken en una conferencia de prensa como colofón a una jornada de compromisos en Hanoi. "Ha tenido una trayectoria extraordinaria en las dos últimas décadas. Nuestra convicción es que puede crecer y crecerá aún más".
No estaba claro cuándo podría acordarse una mejora de los lazos formales, pero Blinken expresó su esperanza de que pudiera producirse "en las próximas semanas y meses".
Antes de su reunión con Blinken, Chinh dijo que ambas partes buscaban elevar los lazos "a una nueva altura", tras una llamada telefónica el mes pasado entre el presidente Joe Biden y el jefe del gobernante Partido Comunista de Vietnam, Nguyen Phu Trong, una conversación que, según dijo, tuvo "un gran éxito".
El aniversario diplomático y la llamada Biden-Trong podrían conducir a un encuentro entre ambos en julio o a otras reuniones de alto nivel, según los analistas, aunque no está claro en qué consistiría exactamente la mejora de los lazos.
Blinken declaró a los periodistas que la seguridad era uno de los componentes clave de las relaciones entre ambos países y señaló que ésta estaba creciendo.
Washington y las empresas de defensa estadounidenses han manifestado abiertamente su deseo de reforzar sus suministros militares a Vietnam -hasta ahora limitados en gran medida a buques guardacostas y aviones de entrenamiento- a medida que el país trata de diversificarse, alejándose de Rusia, que es actualmente su principal proveedor.
Pero los acuerdos militares con Estados Unidos se enfrentan a muchos obstáculos potenciales, ya que los parlamentarios de Washington podrían bloquear las ventas de armas por cuestiones de derechos humanos. Además, las armas estadounidenses son caras, corren el riesgo de provocar reacciones chinas y es posible que no se integren fácilmente con el armamento heredado de Vietnam, según los analistas.
La visita de Blinken forma parte de una estrategia más amplia de Estados Unidos en el sudeste asiático para crear una coalición que contrarreste a China y disuada cualquier posible acción de Pekín frente Taiwán. Muchos países de la región son reacios a enemistarse con su gigantesco vecino, que no es sólo una potencia militar, sino también un socio comercial clave y una fuente de inversiones.
Para Estados Unidos, Vietnam es un socio comercial crucial del sudeste asiático con el que Washington quiere estrechar lazos. Pero para Hanoi ha sido un difícil ejercicio de equilibrismo, entre cooperar con Washington sin molestar a Pekín, aunque Vietnam se ha alarmado por las crecientes reivindicaciones chinas en el mar de China Meridional.
(Reporte de Humeyra Pamuk y Francesco Guarascio en Hanoi; Edición de Christian Schmollinger y David Holmes, Editado en español por Juana Casas)