Acapulco (México), 17 may (EFE).- Los banqueros mexicanos negaron hoy que la crisis europea afecte a las instituciones financieras de este país y aseguraron que la banca está blindada, muy sólida y con perspectivas positivas de desarrollo.
Los dirigentes de la Asociación de Bancos de México (ABM), encabezados por Jaime Ruiz Sacristán, dijeron, no obstante, que a pesar de esas defensas la volatilidad internacional podría impactar al tipo de cambio en México.
Las declaraciones fueron hechas en una rueda de prensa previa a la convención anual de la ABM, que se desarrolla hoy y mañana en Acapulco, en el Pacífico mexicano.
Los líderes bancarios también recordaron que los bancos mexicanos tienen un índice de capitalización sobre activos del 15,7 %, muy por encima del 8 % definido en los acuerdos internacionales de Basilea.
"El sistema financiero mexicano es uno de los más regulados, y estamos perfectamente blindados, existen todos los mecanismos de protección para que no haya contagio (...). El sistema es hoy en día uno de los orgullos de México, y eso nos distingue como país", aseguró en rueda de prensa la presidenta de Scotiabank México, Nicole Reich de Polignac, vicepresidenta de la ABM.
Por su parte, el presidente ejecutivo de la organización de banqueros, Luis Robles Miaja, explicó a Efe que una variación en el tipo de cambio dentro los límites normales no afectará a otras variables como la inflación.
Agregó que sólo una depreciación muy abrupta podría impactar otras variables macroeconómicas, aunque confió en que el Banco de México (emisor) mantenga la vigilancia y tome las medidas adecuadas ante las turbulencias internacionales.
Por su parte, el director general de Credit Suisse, Héctor Grisi, afirmó que la actual situación en Grecia "va a traer un período (...) de mucha turbulencia y volatilidad" en la eurozona y existe el temor en los mercados de un contagio hacia economías como las de España e Italia, y "eso es lo que está provocando la volatilidad".
No obstante, descartó que los bancos mexicanos filiales de los europeos resientan el impacto procedente de la situación de sus matrices, debido a que cuentan con capital suficiente para afrontar cualquier impacto.
Añadió que México tiene perspectivas de crecimiento con finanzas públicas sanas, lo que dará un resultado positivo en el largo plazo, por lo que no existe gran preocupación.
Las declaraciones se conocieron el mismo día que las autoridades mexicanas anunciaron que el producto interno bruto (PIB) del primer trimestre de este año creció en México un 4,6 % con relación a igual período del año pasado.
El presidente de la ABM, Jaime Ruiz, insistió en que los bancos de capital extranjero en México "son filiales y no sucursales", lo que supone que cuentan con autonomía financiera que le da fortaleza y cumplen con las reglas de las autoridades financieras.
Explicó que las sucursales no tienen capital propio, mientras que en las filiales el capital está en México, no en su casa matriz.
En respuesta a recientes críticas del actual presidente de Banorte y exgobernador del Banco de México, Guillermo Ortiz, quien afirmó que la banca extranjera "ordeña" las utilidades en México en favor de sus matrices, Ruiz Sacristán afirmó que los bancos, como cualquier empresa, deciden entregar dividendos a sus accionistas y rechazó que eso signifique alguna medida ilegal.
"Yo no puedo calificar un pago de dividendo con una frase como esa", indicó el líder de los banqueros.
Ruiz Sacristán recordó los avances de la banca en México y descartó que las elecciones presidenciales y legislativas del 1 de julio próximo en el país afecten a la economía.
Indicó que esperan que quien resulte presidente mantenga las condiciones de estabilidad y promueva las reformas estructurales que requiere el país para el crecimiento. EFE
jrm/ag/dmt