BERLÍN (Reuters) - El fabricante de automóviles sueco Volvo (ST:VOLVb) no desarrollará ningún nuevo motor diésel, ya que la reducción de emisiones de óxido de nitrógeno se volverá demasiado costosa, dijo el miércoles el consejero delegado de la compañía en una entrevista.
"Desde la perspectiva actual, no desarrollaremos ningún motor diésel más de nueva generación", dijo Hakan Samuelsson al diario alemán Frankfurter Allgemeine Zeitung.
Samuelsson dijo que Volvo seguiría desarrollando los actuales modelos diésel introducidos en 2013, pero que después los costes de mantenerlos acorde a los más altos estándares anticontaminación no merecerían la pena, y que la generación actual probablemente seguirá produciéndose hasta alrededor de 2023.
En su lugar, Volvo invertirá en coches eléctricos e híbridos, y su primer modelo puramente eléctrico está previsto que esté en el mercado en 2019.
"Tenemos que reconocer que Tesla (NASDAQ:TSLA) se las ha ingeniado para ofrecer este coche por el que la gente hace cola. En este área también debería haber sitio para nosotros, con alta calidad y diseño atractivo", dijo Samuelsson.
Samuelsson había declarado previamente que unas normas más estrictas sobre emisiones elevarán el precio de los coches con motor diésel hasta el punto en el que los híbridos se convertirán en una alternativa atractiva.
El límite de emisiones medias de dióxido de carbono para fabricantes de automóviles europeos necesitará caer desde 130 gramos por kilómetro hasta los 95 gramos en 2021, obligándolos a invertir más en tecnología de emisiones.
Los coches diésel suponen más del 50 por ciento de las nuevas matriculaciones en Europa, lo que convierte a la región en el mayor mercado diésel del mundo con diferencia.