Washington, 30 abr (.).- El Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) de la Reserva Federal (Fed) inició hoy su reunión de dos días para fijar su política monetaria con la inflación por encima de lo previsto, un crecimiento del PIB por debajo de lo previsto y los costes laborales en alza, lo que no deja vislumbrar una pronta bajada de tipos e incluso para algunos analistas podría requerir una subida.
Los expertos consideran que el presidente de la Fed, Jerome Powell, va a tener mayor paciencia en los planes de comenzar una progresiva bajada de tipos desde la actual horquilla 5,25-5,5%, el nivel más alto en más de veinte años.
La inflación sigue por encima del 3 % y los datos preliminares de crecimiento del PIB en el primer trimestre, del 1,6 %, fueron peor a lo esperado y están por debajo de la previsión de la Fed.
Para añadir más quebraderos de cabeza a los gobernadores del emisor, este martes se conocieron datos de los costes laborales en el primer trimestre de 2024, que crecieron un 1,2 % al ritmo más alto en un año.
Todos estos datos descartan una bajada de tipos en esta reunión y dificultan avanzar hacia un ritmo de descenso que permita las tres bajadas de un cuarto de punto cada una este año.
"Esperamos que Powell deje claro esta semana que la Fed no está en condiciones de recortar tipos pronto. No obstante, seguimos esperando que la Fed baje tipos este año (dos veces, empezando en septiembre)", indicó en un análisis Gilles Moëc, de AXA (EPA:AXAF) Investment Managers.
Según un informe de Sevens Report, la incógnita por despejar mañana, cuando Powell comparezca, es si va a despejar las dudas sobre una posible subida de tipos, algo que algunos analistas consideran ahora una posibilidad.
"Si simplemente dice que la Fed reaccionará a los datos como sea necesario y solo confirma tiene la capacidad de subir los tipos, eso no será tan negativo", indica este informe que intenta anticipar la marcha de los mercados antes de la conferencia de prensa posterior a la reunión del FOMC.
Los mercados medirán milimétricamente las palabras del Powell para determinar si sigue manteniendo un horizonte con bajadas en el precio del dinero o si, por el contrario, comienza a sembrar la idea de mantener los tipos en el nivel actual durante el resto del año o incluso apuntar a la posibilidad de un aumento.