Tras una apertura moderadamente alcista, las bolsas europeas se han dado la vuelta, y caen con claridad en estos momentos. El Dax alemán y la Bolsa de Milán son las que lideran los retrocesos, prueba de que son los bancos de esos dos países los que más dudas suscitan ahora mismo.
Deutsche Bank (DE:DBKGn) vuelve a caer cerca de un 3% en estos momentos, tras haber rebotado en la apertura. El banco desmintió ayer que haya solicitado ayuda al Gobierno alemán. Monte dei Paschi (MI:BMPS) sube en estos momentos, al decir que planea convertir deuda en acciones.
Así que de nuevo, el sector financiero lidera los descensos. Las empresas petroleras también se encuentran entre los peores valores, ante un nuevo retroceso del crudo esta mañana (pasando de 48 a 47 dólares). Irán ha vuelto a echar un cubo de agua fría sobre las expectativas que genera la reunión oficiosa de productores que se está celebrando en Argelia, afirmando que no son favorables a una congelación de la producción en estos niveles.
También tenemos caídas destacadas en VW (DE:VOWG_p), cuya cotización se vuelve a tensar por la amenaza de nuevas multas.
Ayer Wall Street cerró con caídas. El S&P 500 perdió un 0,86%, mientras que el Nasdaq se dejó un 0,91%.
Sin embargo, ha sido muy significativo el movimiento de los futuros americanos durante la madrugada. En concreto, desde las 3 a las 5 de la madrugada, se ha registrado una fuerte subida de los futuros americanos, con motivo de la celebración del debate entre los dos aspirantes a la Casa Blanca, y las encuestas posteriores dándole la victoria a Clinton. El peso mexicano, probablemente la divisa más sensible a estos comicios (ante las intenciones de Trump de construir un muro en la frontera), también ha subido.
De tal manera que esa reacción alcista demuestra que Wall Street apoya a Clinton.
Y aquí tenemos un nuevo catalizador, que tendrá un efecto importante en las próximas semanas: las encuestas sobre intención de voto. Probablemente, si estas apuntan a una subida de la intención de voto de Trump, Wall Street sufra. Y por ende, el conjunto de bolsas mundiales.
En Asia, el Nikkei ha rebotado un 0,84%. La Bolsa de Shanghái también ha cerrado al alza. En el capítulo de datos macroeconómicos, tenemos una buena lectura de los beneficios empresariales chinos.
Tenemos una caída de los Precios de Importación de Alemania, y un muy mal dato de pedidos industriales en Italia (pese a que las ventas industriales no salen tan mal).
Esta tarde en EE.UU. conoceremos el índice de precio de viviendas S&P case Shiller del mes de julio a las 15:00, el PMI de Servicios y compuesto a las 15:45, y el índice de confianza del consumidor e índice manufacturero Richmond del mes de septiembre a las 16:00.
Con las caídas de hoy nos acercamos peligrosamente a los mínimos del anterior intento correctivo en Europa. Los 10.250 puntos del DAX, o los 8.600 del Ibex marcan ese soporte. La pérdida de esos niveles confirmarían la continuación de un proceso correctivo interrumpido por la reunión de la Fed la semana pasada.